Los vecinos de Sant Joan, Alicante, anunciaron su vuelta a la calle, medida en la que contarán con el respaldo de la Corporación municipal en su rechazo al crematorio. Y es que la Plataforma Anticrematorio y por la Dignidad de Sant Joan invitó tanto al alcalde, como al equipo de gobierno y a toda la oposición, a la concentración que tendrá lugar el próximo día 24 de enero.

Así, el popular Manuel Aracil ha recogido el guante, por lo que su Gobierno estará frente a las instalaciones de incineración, ubicado junto al Hospital Universitario, en la Avenida Miguel Hernández. El Partido Popular, que ostenta la Alcaldía desde las elecciones de mayo de 2011, mantiene que su postura al respecto «no ha variado desde que comenzó a gestarse el crematorio hace ya unos ocho años», como manifestó el portavoz y edil de Urbanismo, Santiago Román.

Sobre la primera toma de contacto de la comisión, Román aseguró que el encuentro fue positivo. Pese a ello, el concejal prefirió por el momento «guardar cautela. Hay unos pasos a seguir y debemos esperar mientras se sigue trabajando».

Agotada la vía administrativa, la empresa propietaria negó intención alguna de negociar una indemnización, y casi finiquitado el cauce judicial, todas las sentencias han favorecido a al Grupo ASV, «vamos a continuar por la vía social». Y es que poco queda ya más allá de la presión cívica, una vez anulada por un tribunal la revocación de la licencia de actividad del crematorio que acordó el Pleno.

Por su parte, el Partido Socialista en principio no tiene previsto acudir a la protesta, ya que «se podría haber consensuado una concentración entre todos», como aseguró el excalcalde Edmundo Seva, quien añadió que «nosotros mostramos nuestro rechazo al crematorio en los plenos, modificando el Plan General y apoyando al PP en la revocación de la licencia».

Desde el Bloc-Compromís lamentan que la discusión haya derivado en que «ahora nadie tiene la culpa, pero los santjoaners son quienes han de pagar la mala gestión que se ha llevado a cabo desde el principio», como asegura el edil Xavier Sala. «Si en 2005 se hubiese notificado a los vecinos y al colegio de alrededor la instalación del crematorio, la situación sería distinta», apuntó.

Asimismo, el portavoz de Esquerra Unida, César Vilar mantiene que su formación respalda la movilización, «más aún en un tema tan sangrante como este», aunque la asamblea del partido deberá decidir «las decisiones que tomemos con respecto a este tema».