El coordinador forense de la Cruz Roja reivindica la labor “humanitaria” de la medicina forense
El coordinador forense del comité internacional de Cruz Roja, Morris Tidball-Binz, ha reivindicado la labor «humanitaria» de la medicina forense como herramienta en la identificación de cadáveres para consolar a sus familiares, algo que «va más allá de la investigación criminal o penal».
Tidball-Binz ha pronunciado la conferencia inaugural del X Curso de Patología Forense que se celebra en Logroño hasta el próximo sábado, 16 de marzo, y que cuenta con la participación de 180 profesionales de España y varios países latinoamericanos.
Este experto ha presentado las recomendaciones de Cruz Roja en el manejo de cadáveres en conflictos armados y catástrofes para, según ha dicho a Efe, «dar una respuesta a los deudos» y que los familiares puedan «recuperar los restos para realizar los rituales funerarios que requiere su cultura y su religión».
Este reconocimiento de la labor forense «es relativamente reciente», ha admitido, ya que se implantó en 2003, tras una reunión del comité internacional de Cruz Roja en Ginebra, donde se adoptaron diversas normas sobre buenas prácticas forenses para resolver y prevenir la desaparición de personas.
Ha calificado como «alentador» que, a raíz de estas recomendaciones de Cruz Roja, muchos países hayan aplicado diversas medidas para mejorar los sistemas médicos legales, asignarles más recursos y valorar la función del patólogo forense.
Este responsable de Cruz Roja ha detallado que, en la actualidad, hay países de alta conflictividad bélica, como Siria, Nigeria y Colombia, y de un gran nivel de «violencia criminal» relacionada con el narcotráfico, como México, donde «muchos cadáveres quedan sin identificar».