Posibles fusiones de empresas funerarias para cubrir las exigencias del sector y asegurar su futuro
Los requisitos que establece la ley de Entidades de Previsión Obligatoria -EPSV- que el Gobierno vasco obligará a cumplir a las mutuas funerarias a partir de una directiva europea puede abocar al cierre de muchos de las entidades que integran el sector, sobre todo da las más modestas. La nueva legislación les exige demostrar una solvencia económica que únicamente las más grandes -en Bizkaia trabajan una veintena de grupos de diferentes tamaños – parecen estar en disposición de satisfacer.
El listón se ha puesto alto y todas estas asociaciones que nacieron al calor de parroquias para ayudar a los más necesitados deberán justificar fondos y provisiones para poder hacerse cargo, por ejemplo, a la vez del funeral de todos sus miembros.
La Mutualidad Funeraria San Pedro Apóstol de Basauri, gracias a su número de miembros -28.000- y a su solvencia -un saldo positivo anual de 70.000 euros y un tanatorio en proyecto para el que ya ha adquirido un solar-, es la más grande de Bizkaia y sus responsables se ven en condiciones de cumplir los requisitos para mantener así su «independencia» frente a la competencia de las compañías aseguradoras.
En cualquier caso, también son conscientes de que el movimiento mutualista en la provincia corre riesgo de desaparición y por eso ha decidido poner su experiencia -más de medio siglo- al servicio del resto de colectivos. «La unión hace la fuerza» aseguró ayer su presidente, Oscar Olea.
Con este objetivo, a lo largo de los próximos meses llevará a cabo un «proceso de integración» de otras mutuas vizcaínas de menores dimensiones. La primera en aceptar el acuerdo y pasar a formar parte de San Pedro Apóstol será ‘Gure Funeraria Parroquial San Andrés Apóstol de Gamiz». Sus 300 socios ya han aceptado el cambio en asamblea.
Deberán pagar una cuota inicial a parir de la cual abonarán 28 euros al año como el resto de miembros. «Todos los mutualistas pasarán en bloque a formar parte de nuestra mutua» comentó Olea tras garantizar que tendrán los «mismos derechos y obligaciones» que cualquier otro asociado veterano.