Se retirarán las tumbas y panteones del viejo cementerio para convertirlo en zona ajardinada

Camarzana de Tera (provincia de Zamora) procederá a la retirada de tumbas y panteones del viejo camposanto del número 51 de la calle Barrero para convertir el espacio en zona ajardinada.

Será una actuación que se realizará «en breve», según apunta el propio alcalde Francisco Martínez San Román, ya que esta mañana está prevista, en el Ayuntamiento, la apertura de las plicas presentadas por cuatro empresas constructoras para poder ejecutar los trabajos previstos en el proyecto municipal.

El proyecto está financiado por el Plan de Obras del 2013 de la Diputación provincial de Zamora por importe de 35.347 euros y que afecta también a otras intervenciones en este municipio como la construcción de aceras en un margen de la travesía a su paso por Camarzana.

El Ayuntamiento, una vez completado el expediente para el cierre del antiguo camposanto, emplazado en la calle Barrero, en el que no se realizan inhumaciones desde hace un cuarto de siglo ya que a 400 metros se construyó un nuevo cementerio de carácter municipal, procederá al traslado, en cajas o bolsas, de los restos cadavéricos que afloren en el cementerio al realizar la clausura, y que no hayan sido retirados previamente por los familiares de los inhumados o interesados. Estos restos serán posteriormente inhumados en una sepultura colectiva del nuevo cementerio municipal, que el Consistorio destinará para esta finalidad.

Las intervenciones de obra a realizar consistirán en la retirada de lápidas y demás elementos visibles de las sepulturas, y traslado a gestor de residuos, desbroce de terreno, relleno y compactado de huecos en fosas, nivelación de terreno y aporte de tierras para cubrir restos de fábrica, según figura en la memoria proyectada para la clausura del antiguo camposanto de la localidad.

Además, por parte del Ayuntamiento se contempla ahora la retirada de los muros de tapial del antiguo recinto mortuorio, ya que algunos de estos paramentos se encuentran en ruinas.

El viejo camposanto de la calle Barrero de Camarzana de Tera pasará a ser un espacio verde con una superficie de 1.000 metros cuadrados, que no un parque como han apuntado algunos vecinos.