Funespaña podría tener la licencia para el crematorio tras el pleno que se celebrará este mes
El Concello de Pontevedra ultima la regulación de la instalación de crematorios en el municipio. La junta de gobierno local dio luz verde el pasado lunes 14 de octubre a la propuesta de modificación del Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU), que irá al pleno de este mismo mes para su aprobación inicial.
Aunque a partir de ese momento todavía restarán unos seis meses para su entrada en vigor -tendrá que exponerse al público, resolverse las posibles alegaciones y volver al pleno antes de remitirse a la Xunta para su aprobación definitiva-, desde el día siguiente del pleno el Concello podrá conceder licencia a aquellos proyectos que cumplan con los requisitos que contempla dicha modificación.
El director general de Urbanismo del concello, José Manuel Tato, explicó que una vez que se apruebe inicialmente la modificación puntual del PGOU quedará anulada la suspensión cautelar de licencias aprobada por unanimidad en el pleno del pasado mes de noviembre y entrará en vigor otra suspensión, que podrá alargase por dos años, para aquellas licencias que no se atengan a los requerimientos incluidos en la citada modificación.
Es decir, que planteen hornos crematorios en terrenos que no sean rústicos, cementerios o suelo industrial reservado para industrias contaminantes, que son los tres supuestos en que se autorizará su instalación. Y siempre guardando, matizó el teniente de alcalde de Urbanismo, Antón Louro (PSOE), una distancia mínima de 50 metros con respecto a viviendas o a suelo residencial. Esta distancia, recordó el socialista, se fijó teniendo en cuenta la normativa existente en esta materia a nivel autonómico.
¿Pero qué pasa con aquellos proyectos que sí cumplen con estos requisitos? Tato explicó que «una vez que se verifique que cumple, podrán obtener licencia a partir del día siguiente del pleno».
Sin citarlo
Aunque ni el teniente de alcalde ni el director general lo citaron, sería el caso del crematorio que desde hace más de una década proyecta Funespaña -antes Sempsa- en una parcela aledaña al cementerio de San Mauro: está en suelo rústico, cuenta con un plan especial de Infraestructuras y Dotaciones (PEID) aprobado hace muchos meses, y dista más de cincuenta metros de viviendas o zonas residenciales.
Es decir, que Funespaña podría pedir licencia para el crematorio al día siguiente del pleno de este mes. En ese momento los servicios técnicos municipales tendrían que certificar que cumple los requisitos que fija la nueva regulación municipal, y de ser así, el proyecto obtendría licencia.
