Cuatro funerarias pretenden unirse para construir un crematorio en frente del que abrirá Funespaña
Un grupo de funerarias estudia la posibilidad de presentar un proyecto común para construir una instalación que cumpla con los requisitos urbanísticos que ahora exigirá el Concello. El grupo lo integran Pompas Fúnebres, Alianza y Barros, Albia y Servicios Funerarios San Marco, las empresas que promueven hornos en la calle Arcebispo Malvar, en la rotonda de acceso a Montecelo, en Mourente y en San Amaro, zonas prohibidas por el Gobierno local.
Parece que la nueva normativa que regulará el uso del suelo para la puesta en marcha de crematorios en Pontevedra ha abierto un escenario preocupante en el sector. Los propietarios de estos negocios quieren hacer frente al único crematorio que por ahora cumple con la nueva normativa, el que Funespaña pretende abrir en San Amaro.
Y quieren hacerlo precisamente enfrente del que podría ser su principal competidor. La idea sería ocupar una parcela anexa al cementerio de esta parroquia, cuyo suelo, catalogado como equipamiento, es urbanizable y cumpliría con las exigencias urbanísticas.
«Sería positivo que las principales funerarias de Pontevedra llegásemos a un acuerdo. Estamos en negociaciones y no descartamos fusionarnos en un único proyecto», explicó ayer el responsable de Servicios Funerarios San Marco, Juan Perdiz, que recordó que no es la primera vez que se proponen estos terrenos para construir una incineradora. «En su día yo fui de los que propusieron hacer un crematorio municipal, con capital público-privado, en la zona», subrayó.
La gerente de Pompas Fúnebres, Naír Fernández, calificó estos contactos entre las funerarias como un paso para combatir el monopolio del sector en Pontevedra y para hacer frente a la normativa impulsada por el concejal de Urbanismo, al que acusa de favorecer el proyecto de Funespaña, el único que cuenta ya con casi todos los permisos necesarios para iniciar la obra. «Esta iniciativa conjunta nace para frenar la opción de Louro y su agresión hacia nosotros», recalcó.
Pompas Fúnebres se querelló hace aproximadamente un mes contra el edil del PSOE acusándolo de prevaricación. Un juzgado de primera instancia de Pontevedra archivó la denuncia, que ya ha sido recurrida formalmente por la empresa. Louro reconoció el interés de varias empresas para abrir un horno crematorio en la zona de expansión del cementerio de San Amaro.
La ocupación de esta parcela municipal, situada al lado de los nuevos nichos habilitados en el camposanto de esta parroquia, obligaría al Concello a convocar un concurso público para adjudicar los trabajos para la apertura de esta infraestructura.