Los cementerios están llenos de barreras arquitectónicas que impiden el libre acceso a los discapacitados
Es un problema general de prácticamente todos los cementerios españoles pero en este caso nos vamos a referir a los cementerios madrileños, que siguen siendo inaccesibles para las personas con movilidad reducida y, en general, para todas las que tienen algún tipo de discapacidad, que se encuentran con barreras arquitectónicas y de comunicación -a veces infranqueables- para llegar hasta la tumba de sus seres queridos.
Así lo ha declarado a Servimedia Javier Font, presidente del Comité de Representantes de Personas con Discapacidad de la Comunidad de Madrid (Cermi Madrid), con motivo del Día de Todos los Santos.
Según Font, presidente también de la Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de la Comunidad de Madrid (Famma-Cocemfe Madrid), la accesibilidad «no está siendo prioritaria en tiempos de crisis».
Y no lo está siendo, aseguró, ni siquiera en ámbitos de uso cotidiano como el transporte o el urbanismo, lo que hace que en terrenos como el de los camposantos el avance de la accesibilidad sea «inexistente».
Cuando el Cermi habla de que los cementerios son inaccesibles se refiere a que están llenos de escalones, desniveles y otras barreras arquitectónicas que dificultan o impiden a los ciudadanos con movilidad reducida llegar hasta la tumba o el nicho de sus seres queridos.
Pero también la falta de indicadores con letras grandes y contraste de colores hacen a los camposantos inaccesibles, recuerda Cermi Madrid, que señala en este sentido los problemas con que se encuentran los ciudadanos con discapacidad visual cuando quieren visitar a sus seres queridos en el cementerio.