Los cementerios virtuales aumentan su popularidad

El ser humano siempre ha pensado en la creación de herramientas útiles que contribuyan al progreso económico y social, pero en esta era de innovación se ha enfocado en algo quizás impensable por muchos. Inmiscuir en su portafolio tecnológico un espacio para los que ya no se encuentran en este mundo.

¡Un ciberespacio para los muertos!

Rendir un homenaje póstumo a aquellas personas queridas que han partido al más allá es algo que también puede hacerse ahora de forma virtual.

¿Cementerios en el ciberespacio? Sí, tal como suena.  Incluso funerales virtuales, los mismos que han revolucionado la forma de llevar el duelo, especialmente cuando la tumba del ser querido se encuentre a miles de kilómetros.

Cúcuta ha entrado también en la onda de estas nuevas herramientas tecnológicas que nos permiten recordar al ser querido, acompañar a sus familiares y hasta enviarle flores a su tumba, sean virtuales o reales.

“Hoy en día tenemos que estar en la era de la actualización. Para eso está el internet, por eso se creó este espacio como una forma de hacer duelo. Una forma de rendir un homenaje a los que fueron importantes en nuestras vidas”, dijo Martha Monroy, asesora de la funeraria Los Olivos en Cúcuta.

Cada portal se adapta de manera diferente a su público, por eso empezaron a crear estrategias para ‘ir más allá’ de un simple ciberespacio de publicación de mensajes. Por lo general cada entidad busca nuevas innovaciones para ofrecer el mejor servicio a los clientes.

En algunos cementerios virtuales crearon tumbas en un cementerio 3D, pero en la mayoría el doliente puede dejar flores, encender velas o dejar condolencias de manera virtual, permitiendo además que las personas creen una web homenaje donde se pueden colgar fotos, videos, contar anécdotas y participar de un foro donde cualquier persona puede expresar lo que siente. En ocasiones también es usado para recordarlo en familia y así hacer llevadero ese proceso de duelo.

Ha sido tan útil este espacio virtual, que algunas funerarias en el mundo cuentan con un sicólogo que semanalmente se dedica a escuchar, orientar y dar respuesta a inquietudes, dependiendo de la necesidad del doliente.

En la mayoría de los portales que ofrecen este servicio, deben solicitar el usuario de acceso. Luego se le dará la información necesaria para poder acceder y una capacitación para moverse en ese espacio. Una vez haya ingresado puede personalizar su tumba virtual.

Siguen innovando

Los testamentos son usados para que una persona exprese su última voluntad de manera legal, y ésta sea socializada una vez fallezca. Pues basados en esta concepción, algunos cementerios virtuales crearon otra innovación, que viene tomando fuerza en el mundo.

Es un servicio donde el interesado puede escribir un mensaje a sus familiares antes de morir, ya sea personalizado o no. Y una vez fallezca la persona, sus familiares recibirán dicho mensaje.

Por otra parte, para los usuarios móviles, crearon un código de barras especial para que las personas puedan visitar el espacio virtual del fallecido. Es conocido popularmente como el código QR, que al ser escaneado con un teléfono inteligente, lo lleva desde el móvil a la página virtual de esa persona que desean recordar.

Lo que hace peculiar este servicio es que como puede ser leído desde cualquier teléfono inteligente, deciden ponerlo en las tarjetas de condolencias, los sufragios, la lápida, el sepulcro o el lugar donde deseen, para que así puedan conocer ese espacio. Cada tumba virtual, tiene asignado un código distinto.

¿Cómo nacen los cementerios virtuales?

Tragedias como la del 11 de septiembre en EE.UU. y las guerras en Iraq y Afganistán, marcaron notablemente la diferencia en el empleo de los medios virtuales para recordar a los seres queridos.

Muchas personas que perdieron todo tras la caída de las torres gemelas, decidieron  rendir un homenaje a las víctimas, y hacer que el recuerdo de sus amigos y familiares muertos quedara plasmado, así fuera de manera virtual.

Legacy, que tiene una sección dedicada en exclusiva a los militares caídos en Irak y Afganistán, y otros cementerios virtuales como Memory Of y Mem, son algunos de los más populares en Norteamérica.

A pesar de que los cementerios virtuales son famosos en EE.UU. y Europa, la idea de crear este espacio para los difuntos se desarrolló en Suramérica. Paz Eterna, en Argentina, fue el primer cementerio virtual en el mundo.

A esto se suman cementerios famosos como El Adiós (Argentina), que tiene ofrendas virtuales, El Cielo (México), In theMemory of (Inglaterra), Oparadis (Francia) y Los Olivos (Colombia). En Norte de Santander, solo una funeraria cuenta con este servicio.

La experiencia de una Cucuteña

Entregada a su dolor, Miryam no sabía cómo inmortalizar el nombre de su madre, que había fallecido un mes atrás. Ella debía viajar a Venezuela y por cuestiones de distancia no podía visitar con constancia su tumba.

Lo que nunca se imaginó era que sin importar el lugar donde estuviera, podía enviarle flores y hasta hacer que sus hijos y familiares la recordaran.

Un día, hablando de su deseo de inmortalizar a aquella persona que le había dado la vida, encontró una amiga que le habló de los cementerios virtuales.

– He escuchado que ahora las funerarias tienen un espacio en internet, donde se puede visitar el cementerio y  además recordar a las personas que han abandonado este mundo. – le dijo con voz esperanzadora.

Miryam alentada por la curiosidad se acercó a la funeraria para ver de qué se trataba. Ahora, con solo dar un clic en la pantalla compra y envía arreglos florales a la tumba de su madre. Las cancela por medio de los pagos online de la funeraria y a través del chat de servicio al cliente le informan cómo va el proceso.

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