“Cómo voy a comer una manzana de mi huerta si al lado tengo una chimenea procedente de un crematorio”

Una vecina que vive en la recta de Rubiáns, (parroquia gallega en la provincia de Pontevedra) muy cerca del tanatorio en el que se prevé poner en funcionamiento el servicio de incineración. Puso una alegación al presidente de la asociación Souto con relación al expediente del crematorio.

La mujer se preguntaba cómo iba a comer una manzana de su huerta cuando al lado saldría humo por una chimenea procedente de quemar cuerpos», apunta Xurxo Abuín en alusión al dilema emocional que tienen algunos vecinos a la hora de tener un crematorio en el entorno de sus viviendas.

Evidentemente la manzana estaría en perfecto estado para ingerirse, pues atendiendo a las explicaciones del impulsor del proyecto, Eduardo Martínez, el crematorio previsto contamina menos que un todoterreno diésel o las brasas de un asador gracias a la alta tecnología del horno previsto. Además se contemplan filtros extra.

En cuanto a la reunión con los portavoces vecinales, Martínez la valora muy positivamente y asegura que les mostró los planos del proyecto. «La obra les parece algo necesario siempre que no afecte a la población, que era su principal preocupación», declara el dueño de la funeraria.

El número de incineraciones gestionadas por Pompas Fúnebres de Arosa ronda las 70 anuales, una cifra que supone el 14% de los servicios funerarios prestados por esta empresa. Aunque a priori pueda parecer un porcentaje modesto, esta cifra se ha duplicado en tres años, puesto que en 2010 las incineraciones suponían el 7% de los fallecimientos.