El Obispado de Astorga cede el cementerio al Ayuntamiento de La Torre del Valle después de largas negociaciones
El Obispado de Astorga (provincia de León) cede el cementerio al Ayuntamiento de La Torre del Valle (Zamora) después de tres años de negociaciones. La visita realizada el pasado jueves por la técnico de obras de la diócesis para comprobar el estado de la iglesia de La Torre del Valle, tras el derrumbe en días pasados de uno de los muros del templo, ha servido para poner fin a una controversia mantenida durante estos últimos años.
El muro del presbiterio de este templo, en el que desde hace años no se celebran oficios religiosos debido a su estado y que fue derribado en la madrugada del pasado viernes 10 de enero, será reconstruido para lo cual el Ayuntamiento encargará la redacción de un proyecto con el fin de poder costear las obras a cargo de ayudas tanto por parte del titular, la propia Diócesis de Astorga, como Ayuntamiento y otras administraciones, confirmó ayer la alcaldesa, Amparo Feliz, tras la visita de la responsable de obras de la diócesis maragata.
Al menos, la visita de urgencia ha servido para poner fin a una antigua pretensión municipal de que el Obispado ceda el cementerio al Consistorio y permitir así poder acometer obras de reforma y consolidación en el muro de la parte sur del camposanto.
La alcaldesa, aunque ya había recibido buenas palabras del prelado astorgano para la cesión del camposanto, sin embargo desde la diócesis se requería que los gastos acarreados por la escrituración de los terrenos con la ampliación hace dos décadas, corriesen a cargo del Ayuntamiento de La Torre, una circunstancia «inasumible» por este Consistorio que siempre ha manifestado la propiedad de los terrenos de la ampliación.
Fue entonces cuando el Obispado de Astorga inscribió en el Registro de la Propiedad los terrenos circundantes a la iglesia, tanto el viejo camposanto, en la parte norte del edificio, como los terrenos adquiridos por un particular, en la parte sur, en los que se realizó la ampliación del camposanto.
El Consistorio construyó un muro cuyos contrafuertes no impiden el empuje del terreno evidenciando grietas no sólo en la pared, sino que las consecuencias provocan incluso la separación de las losas de los panteones. Al pasar el cementerio a propiedad del municipio éste podrá acometer las obras necesarias para reforzar y consolidar el muro.