El crematorio de Sant Joan, de puertas para adentro
El calor todavía persiste en el interior de la cámara principal del horno pese a que lleva casi 48 horas sin ser puesto en funcionamiento. La piedra reflectaria -material que se suele utilizar en este tipo de mecanismos- es la responsable del bochorno que se siente nada más abrir la compuerta de la instalación, explica el responsable de mantenimiento del crematorio de Sant Joan de Alicante, Pablo Crespo.
La entrada del féretro por dicho lugar indica el inicio del proceso de cremación que dura alrededor de dos horas. Un procedimiento que se repite una media de cinco veces por semana, afirman desde el grupo ASV, y que ha puesto en pie de guerra a los vecinos de la zona, quienes piden el cierre cautelar del horno desde que se puso en marcha hace seis meses por considerar sus emisiones como «altamente contaminantes».
El proceso de cremación abarca dos etapas bien diferenciadas, la combustión y la postcombustión. Es en la segunda fase donde se eliminan las sustancias tóxicas que pueden quedar en el humo, tras la ejecución de la primera, detalló Crespo. La temperatura (que ronda entre los 850 y 1.000 grados), el tiempo de resistencia y la turbulencia de los gases son las tres actuaciones que se dan en esta parte del proceso y que «destruyen», tal y como especificaron los técnicos, los elementos contaminantes. «Todo lo que sale al exterior es transparente», remarcó el responsable del mantenimiento. Con todo, la existencia de un dispositivo que, de manera continua, revisa las emisiones y mide los niveles de opacidad, oxígeno y monóxido termina de ratificar que los humos expulsados no son dañinos, agregó Crespo.
Otro de los pasos que se realiza siempre, de manera previa a la cremación, es la sustracción de elementos que puedan ser «altamente contaminantes». Queda prohibida la entrada de zapatos o marcapasos en el interior del féretro, entre otras cosas.
Proceso ecológico
Este proceso es «más respetuoso con el medio ambiente» que un enterramiento tradicional, destacó el director de comunicación de ASV, Víctor Humanes. De hecho, se evita depositar en la tierra elementos no biodegradables como la madera. Por otra parte, el responsable indicó que los ataudes que se queman son «menos contaminantes» porque estan cubiertos de barniz al agua, no portan herrajes o usan pinturas adecuadas al medio ambiente.