La ampliación del cementerio parroquial de Rubiáns puede ser una realidad a corto plazo

La ampliación del cementerio parroquial de Rubiáns (municipio de Pontevedra de Villagarcía de Arosa) cobra impulso. La comunidad de montes -propietaria de un solar de 1.700 metros cuadrados anexo al camposanto en el que contempla la obra- presentó en el Ayuntamiento de Vilagarcía en mayo del año pasado el proyecto básico de la actuación, el cual acaba de recibir la primera comunicación municipal. El presidente de los comuneros, Xurxo Abuín, asegura que recientemente el Concello le ha requerido más documentación.

Aunque el proyecto se encuentra en trámites en Ravella, Abuín no comprende el «retraso» en dar salida al asunto. «Me sorprende la lentitud, y sobre todo teniendo en cuenta que el urbanismo en Vilagarcía está casi paralizado», apunta el presidente del colectivo.

En un principio la comunidad de montes de Rubiáns planteó formalmente al Arzobispado de Santiago -sin mediar con el párroco- la posibilidad de realizar una permuta para que fuese la Iglesia la que se hiciese cargo de la ampliación del camposanto, puesto que es de competencia eclesiástica. La propuesta era la siguiente: los comuneros querían cambiar al Arzobispado su parcela por otra junto al centro sociocultural. Los vecinos tenían la intención de dotar a Rubiáns de la zona pública de esparcimiento de la que carece, según explica Xurxo Abuín, y ese solar detrás del local de encuentro vecinal se presentaba perfecto.

Pero la Iglesia rechazó la propuesta, sin dar lugar a posibles negociaciones. Y es que la oferta le pareció un tanto desproporcionada al tener mucha más superficie la parcela de la Iglesia que la de los comuneros, según indican fuentes eclesiásticas.

Pese a esta negativa, la comunidad de montes no está dispuesto a tirar la toalla y por ello continúa adelante con el proyecto de ampliación, al considerarlo muy necesario para el vecindario.

Plácet del párroco

Aunque a priori la Iglesia parece que económicamente no está por la labor de contribuir en la iniciativa, sí apoya la idea de ampliar el camposanto porque coincide con los comuneros en que no hay nichos suficientes para satisfacer la demanda. «Hay mucha gente que quiere panteón pero no hay ninguno disponible, entonces hay que hacerlos, hay que ampliar», apunta el párroco de la iglesia de Rubiáns, Juan Figueiras, quien se muestra «dispuesto a dar todas las facilidades a la comunidad de montes» para que el proyecto pueda salir adelante. «Por mi parte, mi informe va a ser favorable a la ampliación, aunque yo solo soy el párroco», puntualiza. El religioso aclara que «solo algún» vecino adquirió sepulturas en parroquias cercanas.

Entierros en otros lugares

El portavoz de la comunidad de montes, Xurxo Abuín, va más allá y afirma que desde hace tres años ya se entierra gente de Rubiáns en otras parroquias ante el «colapso» del cementerio. «Yo conozco a un vecino que compró en Cea porque en Rubiáns no quedan nichos disponibles. Los que están vacíos pertenecen a otras personas», puntualiza Abuín. El sacerdote Juan Figueiras añade que también hay vecinos que se decantan por hacerse con un nicho en concesión en el cementerio municipal, emplazado en la recta de Rubiáns.

Figueiras recuerda que antes de que la comunidad de montes comprase el solar, ya lo había intentado la propia parroquia. En aquel momento el párroco no llegó a un acuerdo con el propietario (no se decidía por el terreno a permutar). Más tarde, con la parcela ya en manos de sus herederos, estos lo vendieron a los comuneros.