Continúan a buen ritmo y ya se encuentran el su cuarta fase las obras de reforma del tanatorio de Torrero

Las obras de reforma interior del tanatorio de Torrero avanzan conforme al calendario preestablecido y abordan desde el pasado martes los trabajos de modernización de los cuatro últimos velatorios pendientes de transformación. Se trata de las salas número 5, 6,7 y 8, que se ubican en la planta baja, a la izquierda de la escalera principal. No obstante, pese a la actualización de los espacios que se lleva a cabo, el tanatorio presta servicio con total normalidad.

El lunes, 15 de septiembre, terminó la intervención en las cuatro salas de la planta baja en las que se intervenía desde el pasado 25 de agosto, lo que ha permitido que hoy empezarán a dar servicio y se avanzara con los cuatro últimos velatorios pendientes de modernizar. La transformación interior de las instalaciones funerarias se ha organizado por fases para mantener la actividad del edificio y no alterar el servicio que se da a los usuarios que velan a sus familiares y amigos hasta el momento de la incineración o de la inhumación.

Los trabajos de modernización que se llevan a cabo pretenden conseguir un clima de mayor confort y de privacidad para las personas que utilizan estas instalaciones públicas. Fundamentalmente, se interviene en la pintura y forrado de las paredes de las estancias, también se cambian las puertas de los accesos, propiciando más luz natural. Las intervenciones afectan además a las luminarias del edificio y al mobiliario.

La mejora de las instalaciones, que lleva a cabo la concesionaria del tanatorio, Serfutosa, supone la inversión de 709.000 euros y tiene un plazo de ejecución de cinco meses que, hasta el momento, se está cumpliendo con precisión. Los trabajos que acaban de comenzar en los velatorios 5, 6, 7 y 8, se realizarán al igual que en los 12 ya modernizados, fundamentalmente en horario nocturno para no interferir en la actividad diaria del edificio. Cuando se completen estas salas, se pasará a trabajar en el hall y las dos capillas, que se refundirán en una, así como en los despachos y la cafetería ubicados en la primera planta.