Los centros comerciales de Tokio tienen a la venta varios modelos de ataúdes
Llegar a su centro comercial y que un dependiente le ofrezca «probarse» un ataúd comienza a ser normal en Japón. El interesado se mete, deja que le cubran con una mantita y que cierren la tapa. Su futuro ataúd, ya está listo para que se lo lleve a casa.
¿Más preparativos para su muerte? Pueden pasarse por un seminario donde les enseñan cómo redactar un buen testamento. En Japón todo es posible y más con un negocio, el funerario, que se ha cuadruplicado en los últimos años, según envejece su población. «La gente no quiere que su muerte se convierta en un engorro para sus familias», explica el responsable del departamento de funerales «Así que, cada vez, dejan las cosas más planificadas».
Y para los que buscan lo último en moda funeraria: un cementerio digital. Uno pasa su tarjeta y miles de budas se iluminan. El único que parpadee, será el suyo, donde reposen sus cenizas. Una buena solución para la escasez de cementerios en la capital, Tokio, donde los precios estratosféricos de los nichos están forzando soluciones así de – literalmente – «brillantes».
Los centros comerciales de Tokio tienen a la venta varios modelos de ataúdes: Llegar a su centro comercial y que… http://t.co/MfBbn4VKAk
Bueno parece que los japoneses son más previsores y menos temerosos a la muerte.