La funeraria Funelca denuncia prácticas de competencia desleal entre empresas funerarias

Los responsables de la empresa funeraria Funelca (Aranda de Duero, Burgos) han denunciado que son víctimas de prácticas que pueden considerarse competencia desleales. Aseguran que tienen constatado que las esquelas de los velatorios y sepelios que ellos organizan las arrancan sistemáticamente personas del entorno de la otra empresa que presta sus servicios en el mismo sector en la capital ribereña. «Van por los sitios donde se ponen las esquelas, disimulando como que van a poner una, y arrancan las nuestras», afirma Carlos Rodríguez, gerente de la empresa Funelca.

Por parte de la empresa Servicios Funerarios Arandinos, pionera en este sector en la comarca ribereña, desmienten con rotundidad que ellos tengan nada que ver con las esquelas arrancadas y aseguran que también son víctimas de estas prácticas. «A nosotros también nos quitan las esquelas, incluso los párrocos nos llaman porque las han quitado de la puerta de la iglesia, y nosotros solo quitamos las que están pasadas, empezando siempre por las nuestras», comenta Ángel Zanetti, responsable de esta empresa, quien apunta que no quieren entrar en ese juego. «Si nos quieren crear una guerra, nosotros no estamos por la labor», reitera Zanetti.

La imagen de esquelas arrancadas se repite desde que, hace tres años, desembarcase Funelca en Aranda, donde hasta ese momento tan solo había una firma que ofreciese este tipo de servicios. «No estaban acostumbrados a tener competencia y no han hecho otra cosa que hacer este tipo de cosas para intentar perjudicarnos, pero no se dan cuenta que los que salen perjudicados son los familiares de las personas fallecidas», reconoce Rodríguez.

Y es que algunas personas del entorno de los difuntos cuyas esquelas han sido retiradas al poco tiempo de ponerse en los lugares habituales se han quedado de la falta de difusión de los datos funerarios, situación que desde Funelca intentan suplir colocando otra vez las esquelas arrancadas. «Nosotros ya somos consciente de la situación y lo que hacemos es que si de normal hacen falta 15 esquelas, nosotros sacamos 40 y vamos reponiendo las que quitan, lo hacemos dos y hasta tres veces», asegura el responsable de Funelca.

Estos hechos los pusieron en conocimiento tanto de la máxima autoridad municipal como la Policía Local, que intentó mediar, aunque sin éxito, para que cesasen estas prácticas. «La Policía Municipal llamó a los responsables de esta otra empresa para que fuesen a la comisaría a intentar aclarar la situación y se negaron a ir», lamenta Carlos Rodríguez, que afirma que tienen testigos que les han visto arrancar sus esquelas. «No entienden que estamos en un mercado libre y estamos pagando las consecuencias de que ya no tenga el monopolio y se tenga que adaptar a precios y servicios», considera el responsable de Funelca.

Desde esta empresa, que tiene experiencia en el sector funerario por gestionan edificios relacionados con la actividad mortuoria en las provincias de Salamanca, Ávila y Segovia, no han querido interponer una denuncia por escrito ya que «sería molestar a los señores que lo han visto y podrían actuar como testigos» y solo esperan que, con el paso del tiempo, estos actos dejen de registrarse.