Villargordo ya cuenta con un tanatorio propio, bautizado con el nombre de Cristo de la Salud
Era una reivindicación histórica de sus vecinos, que cada vez que fallecía algún familiar tenían que desplazarse hasta Jaén. Ahora, en Villargordo (provincia de Jaén) ya cuentan con su propio tanatorio, bautizado con el nombre Cristo de la Salud, un espacio que fue inaugurado por el alcalde, Sebastián López, y el párroco del municipio, José María Romero. “Era una reivindicación vecinal a la que se ha podido dar respuesta”, explicó el regidor, que agradeció el tesón de la iniciativa privada para ponerla en marcha.
Y es que este tanatorio sale de la unión de cinco amigos, que decidieron hacerse socios y compartir un sueño que ya es una realidad. Gracias a su esfuerzo y dedicación, las instalaciones han podido materializarse, tal y como relató Mari Ángeles Teruel, que atenderá a los usuarios en el centro, momentos antes de cortar la cinta inaugural y de bendecir el nuevo tanatorio de Villargordo.
Los cinco socios son Luis del Moral, Rafael Cabrera, Emilio Becerra, Manuel García y Alfonso Luque. Luis del Moral puede considerarse el “inventor” del proyecto. “Nos juntamos cuatro amigos y vimos que esto era el futuro porque aquí no había y era muy necesario”, relata. Por eso, apostaron por reunirse y crear el primer tanatorio de Villargordo. Invirtieron unos 350.000 euros para poder edificar las instalaciones. Ahora mismo cuentan con una funeraria a su servicio y, poco a poco, se procederá a contratar a más personal.
A pesar de que reconoce que son “novatos” en el negocio, a Luis del Moral no le viene de nuevo y por esos sus compañeros ha decidido depositar su confianza en él. Porque si hay algo que tiene claro es que este es solo el principio de una nueva andadura, ya que el objetivo es poder ampliar el negocio conforme se vaya consolidando.
Por su parte, el alcalde de Villargordo explicó que el Ayuntamiento ya planteó, en su día, la necesidad de ofrecer un servicio de este tipo. Tanto es así, que sacó a concurso público unos terrenos para que aquellas empresas que estuvieran interesadas pudieran presentar su oferta. Entre ellas se encontraba la que ahora regenta el tanatorio que, en palabras de López, era la más “potente”. Sin embargo, los cinco socios decidieron retirarse del proceso, comprar sus propios terrenos en el polígono y crear un servicio que da respuesta a las necesidades vecinales.