El próximo verano abrirán al púbico el yacimiento arqueológico de tribisburu en el País Vasco

Se espera abrir al público el yacimiento arqueológico de Tribisburu, en el monte Sollube, (Bermeo, Vizcaya) el próximo verano, según ha informado la Diputación. La diputada foral de Euskera y Cultura, Lorea Bilbao, ha visitado el yacimiento, una necrópolis romana de incineración que data de los siglos I al III d. C. y que es la única de sus características en Bizkaia.

En la visita ha estado acompañada de Juan José Cepeda, el arqueólogo que ha dirigido los trabajos de campo para la consolidación de este yacimiento. La necrópolis está situada en una cota de unos 500 metros de altitud en el alto de Tribisburu, en las faldas del monte Sollube, y a caballo entre los municipios de Busturia y Bermeo.

Los primeros indicios sobre la presencia de este yacimiento datan de 1994, pero fue en 2013 cuando el servicio de Patrimonio Cultural de la Diputación incluyó Tribisburu entre sus proyectos de investigación. En estos dos últimos años se ha excavado y consolidado una parte de los monumentos funerarios.

El yacimiento está compuesto por un conjunto de estructuras funerarias, de las que hasta el momento se han localizado y excavado diez, construidas en mampostería de arenisca. Son pequeñas celdas cuadrangulares de unos 15 metros cuadrados, en las que se han localizado cenizas y efectos personales incinerados de los difuntos allí enterrados.

El rito funerario utilizado en Tribisburu es la incineración del cadáver del difunto sobre una pira de leña, junto con su ajuar personal y las ofrendas que recibidas de sus allegados.

Para ello, en el mismo lugar de la necrópolis, pero fuera de las estructuras de enterramiento, hay plataformas en las que se realizaron las incineraciones, denominadas ustrina. Es precisamente el rito de incineración el que distingue a esta necrópolis de otras necrópolis romanas localizadas, siendo la de Tribisburu la única de esta clase encontrada hasta el momento en Bizkaia.

Los restos humanos hallados están en malas condiciones de conservación, tanto por su incineración inicial, como por el ambiente húmedo del Sollube, que no ha ayudado a su conservación. También se ha encontrado una cantidad abundante de materiales, aunque muy fragmentados, tales como restos de vestidos, calzado, armas, adornos u objetos de uso cotidiano, como platos y ollas de cerámica, y frascos de vidrio.

Estos restos hallados no dejan duda de la cronología y de que de la necrópolis de Tribisburu estaba en pleno uso entre los siglos I a III d. C. La conclusión es que el yacimiento es la necrópolis de una comunidad local, romanizada, cuyo núcleo de población debiera de haber estado situado en las inmediaciones. La búsqueda en las zonas próximas no ha dado resultados, aunque apuntan buenas posibilidades lugares como los barrios de Tribis o Demigus en Bermeo.

«No es de extrañar la presencia de este enclave romano en esta zona si tenemos en cuenta que sólo en la ribera izquierda de la ría de Mundaka podemos encontrar los puertos y asentamientos romanos de Bermeo, Portuondo (Sukarrieta) y Forua. El entorno del monte Sollube es una de las zonas con potencial arqueológico más amplio y variado de Bizkaia», ha añadido la diputada foral de Euskera y Cultura.

Finalizados los trabajos de excavación y consolidación de la zona de la necrópolis intervenida, la Diputación tiene previsto señalizar el conjunto arqueológico e integrarlo en las sendas arqueológicas visitables de la zona. Se espera que esté acondicionado para ofrecer visitas guiadas a la ciudadanía dentro de un año, en verano de 2016.