El cementero de Utrera dispone únicamente de 140 nichos para cubrir los enterramiento de un año

El cementerio municipal de Utrera (provincia de Sevilla) se encuentra al borde de agotar su capacidad de enterramientos, lo que ha motivado que el Gobierno municipal (PSOE-IU) se ponga manos a la obra a buscar soluciones a corto plazo. De hecho, según el concejal de Agricultura y Servicios Operativos –responsable de este recinto–, Vicente Llorca Tinoco, en el camposanto utrerano solo quedan disponibles para una población que supera los 53.000 habitantes 140 nichos. Es decir: lo que sería el equivalente a los enterramientos de un año.

El principal problema para el Consistorio estriba en que el suelo municipal en el entorno del cementerio se encuentra agotado y toda posible ampliación pasa necesariamente por acuerdos vía negociada o mediante expropiación –extremo al que el Consistorio no quiere llegar— con la familia propietaria de los terrenos colindantes. El edil responsable es consciente de la rapidez en la actuación y asegura poder alcanzar acuerdos en este sentido en breve porque según asegura «el tiempo se nos echa encima, entre que se adquieren los terrenos, se realiza el proyecto y se ejecutan las obras, y solo nos queda un año para hacer todas estas actuaciones».

La idea inicial del Gobierno municipal pasa por duplicar la superficie del camposanto, que en la actualidad se sitúa en 25.000 metros cuadrados, para realizar los nuevos nichos y adaptar el cementerio a nuevos servicios, como serían patios específicos para enterramientos de incinerados. En este sentido, hay que recordar que el cementerio de Utrera cuenta en su interior con un crematorio donde anualmente se vienen a incinerar en torno a 150 fallecidos, de los que aproximadamente algo más de un tercio proceden de Utrera, mientras que el resto proviene de otros pueblos de la comarca.

Una de las opciones que baraja el concejal del cementerio sería la de trasladar a los terrenos de la futura ampliación el crematorio para modernizarlo, además de para mejorar las condiciones laborales de los empleados. También está en estudio la posibilidad de cambiar a este lugar el emplazamiento del actual tanatorio de Utrera, que se encuentra frente al cementerio, para crear en el nuevo proyecto una instalación conjunta.