Cementerio civil y militar de Tetuán
Existían numerosos cementerios cristianos (europeos los siguen llamando algunos, otras veces españoles), con parte civil y militar, en lo que fue hasta 1956 el Protectorado de España en el Norte de Marruecos, que albergaban abundantes restos mortuorios de ciudadanos españoles y otros europeos, que, después de la recuperación de la total independencia marroquí, pasaron, como el resto de los territorios de esta zona protegidos por España, a encontrarse bajo la soberanía de Marruecos.
España, sin embargo, de distinta forma y con intensidad variada, ha continuado ejerciendo, a través normalmente de sus Consulados en Marruecos, el mantenimiento de los mismos, pues, dada la característica especial de este Estado que profesa como religión oficial la islámica, que es obligatoria para sus ciudadanos, teniendo en cuenta que no son musulmanes dichos lugares y los consideran como algo ajeno a ellos en su condición de Estado confesional, se encontraron durante bastante tiempo desprotegidos, sin cuidado alguno y abandonados por parte de cualquier autoridad marroquí fuera estatal o municipal, permitiendo que España, si lo deseaba, hiciera labores de mantenimiento, limpieza y vigilancia.
Parece ser que, ante la carencia de recursos y la dispersión de estos lugares de enterramiento, durante algún tiempo, el Gobierno español intentó prestarles alguna atención, aunque con escaso éxito, a través de sus Consulados en el Norte de Marruecos (Tetuán, Larache, Tánger y Nador), sin adjudicarles unas atribuciones o cometidos específicos, basándose en sus competencias residuales de protección consular. Poco se pudo hacer, entre otras razones, porque no existía una encomienda específica al respecto y se carecía absolutamente de medios para recuperación y mantenimiento.
Hace algunos años, se decidió por una Comisión Interministerial Exteriores-Defensa que la única manera de poder dispensar a estos lugares una atención mínima de mantenimiento y protección era concentrar los restos en unos pocos cementerios para evitar, al menos, el pillaje y violaciones de tumbas de que venían siendo objeto ante la despreocupación de las autoridades locales e impotencia de las españolas, al desestimarse la idea de crear un macrocementerio en terrenos del llamado Hospital español en Tetuán, que albergase los restos de todos los antiguos cementerios españoles en la parte noroccidental marroquí.
Se tardó bastante en arbitrar unos presupuestos mínimos de adecentamiento y vigilancia. En resumidas cuentas, en la actualidad, en esta demarcación consular, que comprende toda la Wilaya de Tetuán, provincias de Tetuán, Xauen y Larache y Ouazzane, los restos de los distintos cementerios españoles o europeos (o cristianos) fueron concentrados en los de las ciudades de Tetuán, Martil (antigua Río Martín) y Larache, siendo atendidos los dos primeros por la Oficina consular en Tetuán y los de Larache por aquella otra Oficina consular. Esta es la razón de que existan en dichos cementerios, particularmente en el de Tetuán, un gran número de nichos, que albergan los restos trasladados y algunas fosas comunes.
También es de señalar que no siempre resulta sencillo, cuando no imposible, la localización de algunas tumbas y restos, ya que la mayor parte de los documentos escritos sobre los enterramientos han desaparecido, conservándose solo en el Consulado documentación muy fragmentaria y deteriorada por haber estado durante muchos años abandonada y bajo la inclemencia del tiempo. Además existe un pequeño cementerio, que alberga una docena de restos de tumbas, de difícil identificación, que es “protegido” por España, aunque disponiendo de nula documentación sobre los restos que cobija, supuestamente de españoles, en Yehba (antiguo Puerto Capaz), en la provincia de Xauen.
El cementerio militar se encontraba en muchísimo mejores condiciones porque el Ministerio de Defensa, a través de su Agregaduría en Rabat, facilita regularmente recursos para su conservación, algunos de los cuales han sido aprovechados también para adecentar, en lo que se puede, el Civil (eliminación de matojos y maleza).
En el cementerio civil se han acometido obras que han permitido mejorar la vivienda que ocupa el guardián, todo ello gracias al Mº de Asuntos Exteriores y de Cooperación.
También es cierto, como se ha anticipado líneas arriba, que la documentación de estos lugares ha permanecido durante bastante tiempo abandonada en condiciones de exposición a la intemperie y humedad, habiéndose perdido y deteriorado buena parte de ella hasta que fue recogida por el Consulado General de España, que la custodia en la actualidad en sus archivos del Consulado.
Tetuán es una ciudad del norte de Marruecos, ubicada en las proximidades del mar Mediterráneo, cerca de Tánger y de la ciudad española de Ceuta.
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