El tanatorio de Boisaca tiene averiado su horno crematorio y han de desplazar a los cadáveres a otras localidades

El incinerador del Tanatorio Municipal de Boisaca de Santiago de Compostela (La Coruña) está averiado desde hace dos semanas y, de momento, no tiene solución. Según explicaron fuentes de la empresa concesionaria del servicio en declaraciones a este periódico, el único horno crematorio de la capital gallega se estropeó desde hace “dos semanas”.

“Estamos esperando a que vengan técnicos de la firma catalana que lo instaló para que valoren si tiene reparación o si compensa comprar uno nuevo”, comentó uno de los responsables de las instalaciones, antes de añadir que hacerse con un nuevo quemador supondría una inversión que oscila entre 70.000 y 200.000 euros, dependiendo del modelo y de la capacidad de funcionamiento.

Las funerarias tienen que desplazarse a tanatorios de otras ciudades, el servicio en Santiago de Compostela cuesta 300 euros, mientras que en un crematorio privado dobla la cuantía.