En el bosque de Grunewald de Berlín, se encuentra el cementerio de los suicidas
Al oeste de Berlín (capital de Alemania) se encuentra el bosque de Grunewald y en él un pequeño cementerio con una peculiaridad: la mayoría de los cuerpos que descansan en sus tumbas pertenecen a personas que se quitaron la vida.
El cementerio de Friedhof está emplazado cerca de un margen del río, en la bahía Schildhorn a donde arrastraba la corriente los cuerpos de aquellos que se habían suicidado lanzándose al Havel. La prohibición de la Iglesia católica de enterrar los cuerpos de los suicidas en un cementerio junto con el gran número de cuerpo que llegaban, originó que se empezasen a enterrar los cuerpos en este emplazamiento. Sus tumbas, anónimas, contaban con una cruz de madera.
En este cementerio, único en Alemania, se halla también la tumba de la artista y cantante Christa ‘Nico’ Päffgen, quien tras visitar el cementerio con su madre de pequeña expresó el deseo de ser enterrada ahí. Además, ahí se encuentran enterrados unos 1.200 soldados alemanes que murieron en 1945 y el cuerpo de una sirvienta que tras tomarse una alta dosis de pastillas se lanzó al Havel. Creyéndola muerta, fueron a enterrarla aunque alguien se dio cuenta que la joven seguía viva. Unos años más tarde, la joven volvió a intentarlo y ésta vez sí que perdió la vida y fue enterrada en este cementerio.