Un recorrido por las tumbas más ilustres del cementerio de Soria empezando por la 810
El pasado viernes un grupo de 55 alumnos y dos profesores del Instituto de Educación Secundaria Alborán de la ciudad de Almería entraban en el cementerio de Soria. Alojados en el Parador de Turismo Antonio Machado. Ni siquiera han elegido el alojamiento al azar: han ido desde Almería a Soria para hacer una ruta machadiano-becqueriana.
El objeto de esa fugaz visita al cementerio ha sido para visitar la tumba 810, la más famosa, la de Leonor Izquierdo, la joven esposa del poeta Antonio Machado. Desde ahí, el grupo ha visitado el olmo donde puede leerse uno de los más grandes y universales poemas de Machado, ‘A un olmo seco’. Ellos, de hecho, allí lo han leído.
La tumba de Leonor recibe cada año a numerosos visitantes que vienen de los lugares más insospechados atraídos por la poesía de Machado y sus inspiraciones. Ahora, desde hace apenas unas semanas, la tumba no permanece como la única susceptible de atraer la visita de turistas o personas interesadas. Coincidiendo precisamente con el pasado 22 de febrero, 78 aniversario de la muerte de Machado, el Ayuntamiento de Soria dio a conocer un folleto en el que se recogen unas pequeñas biografías de 30 personas ilustres que están enterradas en El Espino.
Además del folleto, cerca de la entrada principal del camposanto hay un cartel que recoge la información del papel: las biografías, el mapa y la localización exacta: el patio en el que se encuentran y el número de tumba o nicho, sin los cuales no sería necesario encontrar algunas de estas inhumaciones. Hay poetas, filósofos, novilleros, militares, intelectuales, novelistas, algunos músicos, arqueólogos, sacerdotes, historiadores, políticos, pintores, periodistas, psicólogos, médicos, botánicos, ingenieros, espeleólogos…
La tumba más antigua es de 1898 (Nicolás Rabal) y hay dos de febrero de 2011 (Odón Alonso y José Antonio Pérez Rioja). Además de conocer la historia de estos ilustres, visitando el cementerio también se pueden admirar algunas pequeñas obras artísticas (panteones, esculturas…) o textos que, por salirse de lo normal, también resultan atractivos.