Áltima denuncia a Cementiris de Barcelona por la posición de dominio y abuso en la cremación

Áltima ha presentado una instancia al Ayuntamiento de Barcelona en la que denuncia «la posición de dominio y abuso» que mantiene la empresa municipal Cementiris de Barcelona al vincular la venta de urnas a la contratación de la incineración –en la que tiene el monopolio– y al exigir la exclusividad a sus proveedores.

La compañía funeraria privada aduce que la empresa municipal ha incorporado «políticas discriminatorias» en forma de una nueva tasa desde que en marzo Áltima empezó a ofrecer a sus clientes adquirir directamente la urna, ha expuesto en un comunicado este lunes.

También critica que el pliego técnico aprobado en febrero de 2016 para homologar a proveedores de urnas funerarias y relicarios para Cementiris de Barcelona incluye una cláusula de exclusividad hasta un radio de 50 kilómetros a la redonda de la capital catalana, que es «contraria a la normativa de Competencia».

Competencia desleal
Áltima ha afirmado que con estas prácticas «se evidencia una vez más la voluntad del Ayuntamiento de ejercer su posición de fuerza en este sector y que puede acontecer, como en este caso, en competencia desleal».

Ha insistido en que también recela de la neutralidad competitiva que puede significar la aparición de un operador público funerario, «tal y como ya ha apuntado la Autoridad Catalana de la Competencia (Acco) recientemente».

Ha expuesto que, desde el sector, hay cierto escepticismo porque el Ayuntamiento no abuse de su posición ventajosa en la nueva empresa funeraria municipal que completará los servicios que actualmente ofrecen de forma exclusiva en cementerios y crematorios, y de los que el Ayuntamiento «se reserva el monopolio en detrimento del resto de operadores privados del sector que solo pueden ofrecer en Barcelona una parte de sus servicios».