El alcalde de Lebrija confirma que gestionarán los dos cementerios a partir del 1 de septiembre
El Pleno del Ayuntamiento de Lebrija aprobó, cuando gobernaba la alcaldesa anterior, María José Fernández, que el Ayuntamiento se haría cargo a partir del 1 de septiembre de la gestión de los cementerios del municipio. Así lo ha confirmado el nuevo alcalde de la localidad, José Barroso (PSOE). Ambos cementerios son parroquiales, el de Nuestra Señora de la Oliva y el de San Benito
Los dos camposantos todavía dependen de la Iglesia en Sevilla, aunque la Archidiócesis está intentando llegar a acuerdos con ayuntamientos o empresas del sector para no llevar su gestión directamente. En el caso de Lebrija, la gestión se hará a través de la empresa municipal Inmuvisa, que, mediante una encomienda, asumirá a los cinco trabajadores que, hasta la fecha, estaban vinculados a los dos cementerios. Dos de ellos están adscritos al tanatorio que se acondicionó en San Benito, hay dos sepultureros y un administrativo.
En el Cementerio de Nuestra Señora de la Oliva la cesión de la gestión se hará mediante un derecho de usufructo por el plazo de 30 años, por los que el Ayuntamiento pagará a la Iglesia algo más de 20.000 euros anuales durante una década. El Cementerio de San Benito, que ya se construyó sobre un suelo municipal, pasará a ser propiedad del Ayuntamiento. El Consistorio tendrá que abonar, eso sí, a la Archidiócesis parte de la inversión no amortizada que hizo en este espacio.
Son unos 700.000 euros, de los que el 50% deben pagarse antes del 30 de septiembre y la mitad restante antes del 15 de enero de 2018. Previamente a la firma de estos acuerdos, ambas partes han dejado en suspenso un concierto anterior, aprobado en 2003 y con una vigencia de 50 años, en el que inicialmente se contemplaba que los suelos municipales sobre los que se asienta el nuevo cementerio pasarán a ser de la Archidiócesis, algo que legalmente no es posible. Con la intención de mantener la gestión conjunta de ambos cementerios se ha llegado a este nuevo acuerdo.
Entre los cementerios que siguen siendo de titularidad parroquial en Sevilla está también el de San Juan de Aznalfarache, cuyo Ayuntamiento estuvo en negociaciones en 2015 con la Archidiócesis para que se le cediera la gestión. En este caso no fue posible, porque aunque está vinculado a San Juan, el camposanto se ubica en suelos que pertenecen a Mairena del Aljarafe y un Ayuntamiento no puede operar fuera de su término. Hubiera sido necesario crear una empresa municipal o ente similar para el cometido, algo que imposibilitó la nueva ley de reforma local y los planes de ajuste en el Ayuntamiento. Finalmente, una empresa privada se hizo cargo del mismo tras un acuerdo con la Archidiócesis.
Lebrija sí contaba ya con Inmuvisa (Iniciativa Municipal para la Vivienda S.A.) una empresa del Ayuntamiento que, más allá del cometido para el que fue creada, ha ido asumiendo nuevos servicios públicos tras el rescate de su gestión a empresas privadas por parte del Ayuntamiento. Así ocurrió con el servicio de recogida de residuos sólidos urbanos, tras el acuerdo de rescisión del contrato con la concesionaria alcanzado en el año 2011 durante el plan de pago a proveedores. El servicio tiene unos 26 trabajadores adscritos. Inmuvisa también asumió la limpieza de edificios municipales, con 49 personas en plantilla, que se suman a la quincena de trabajadores que, específicamente, tenía para el tema de vivienda. Inmuvisa lleva igualmente la gestión del teatro municipal de Lebrija.
«Apostamos por lo público desde lo público», subrayó el nuevo alcalde socialista, quien destacó que cuando han apostado por la gestión directa de este servicio es porque confían en mejorarlo. En este sentido, Barroso anunció que en los próximos meses se pretenden hacer mejoras, sobre todo, en las dos salas de duelo con las que cuenta actualmente el tanatorio ubicado en San Benito.