San Mauro dispondrá de espacio para esparcir cenizas, funerales laicos y 1.000 cofres de incineración
El cementerio de San Mauro de Pontevedra iniciará, en otoño, una importante reforma para su modernización, presentado la recreación de Voltar á terra, el proyecto para contar con una pradera para esparcir las cenizas funerarias, realizar ceremonias laicas, y con más de un millar de espacios para cofres de incineración en el cementerio pontevedrés.
La concejal responsable de Cementerios, Carme Fouces, (BNG) presentó la iniciativa, como respuesta a «numerosas peticiones de personas que se acercan al cementerio que reclaman y piden la posibilidad de esparcir cenizas o celebrar alguna ceremonia que no sea de tipo religiosa, una despedida a sus seres queridos de una manera diferente».
El proyecto empezó como algo más pequeño y fue creciendo con el paso del tiempo. Se actuará en una parcela de casi 6.000 metros cuadrados situada en la parte nueva del cementerio. Constará de una zona para realizar ceremonias laicas, con capacidad para unas 80 personas, y dispondrá de 1.083 columbarios. Los habrá de cuatro cofres (37), de cinco (50) y de seis (34), además de sepulturas con cofres incrustados en la tierra (481). Las concesiones administrativas serán por 75 años.
Además de todo ello, las familias podrán utilizar una zona de ceremonias con parte cubierta y abierta. Tendrá capacidad para unas 80 personas sentadas. El gobierno local pretende con esta actuación dar respuesta a las nuevas necesidades funerarias y a una tendencia al alza, como es la incineración.