Artistas de seis países pintaron 18 murales en el Cementerio General de La Paz
Artistas de Argentina, Bolivia, Chile, España, Italia y Perú pintaron 18 murales para embellecer el Cementerio General de La Paz (Bolivia) para la celebración la próxima semana de las fiestas de Todos los Santos y Día de los Difuntos.
Entre la semana y el principio de la actual, los artistas participaron en el segundo encuentro denominado ‘Ñatinta’ organizado por el colectivo boliviano Perros Sueltos para expresar su arte y su visión sobre la muerte, informó a Efe la coordinadora del grupo, Magda Rossi.
La temática se enfoca en la festividad de Todos Santos que se conmemora el 1 de noviembre y la del Día de los Difuntos, que se celebra el día siguiente, que son dos expresiones culturales muy arraigadas entre los bolivianos.
Los seguidores de la festividad tienen la creencia de que las almas de los difuntos visitan a sus familias en estas fechas por lo que se prepara una recepción con mesas llenas de flores y la comida y bebida que les gustaba en vida.
Los murales también abordan la temática de la fiesta de las «Ñatitas», que es una celebración con calaveras humanas que se hace cada 8 de noviembre cuando son paseadas por los cementerios.
«Hemos pensado enfocar todo el evento en rescatar el patrimonio cultural intangible de Todos Santos y las ‘ñatitas’ que es algo único en Bolivia y todo lo que está ligado al culto andino de la muerte», comentó Rossi.
Muchos bolivianos guardan en sus casas las calaveras, algunas de las cuales son de sus familiares, por la creencia de que hacen favores a los creyentes. Entre los artistas que participaron del evento están Jorit, de Italia; Lluc, de España; el grupo Madianeras y Coche de Argentina; Valentino, de Perú; Ledorian, Bufón y Memo de Chile.
Los artistas bolivianos firman como Khespy Pacha, Puriskiri, Nona, Sak Crew, Die77, Oveja 213 y Knorke Leaf. Esta versión incorporó la realización de tres murales de grandes dimensiones con la finalidad de que sea un atractivo turístico que se pueda ver desde una de las líneas del sistema del teleféricos.
«Vi una señora que hablaba con el nicho, que asumo que era de su pareja, entonces quería retratar como mantenemos tan vivos a nuestros muertos», comentó el artista boliviano Puriskiri.
El administrador del cementerio, Ariel Conitzer, enfatizó que con este proyecto se revaloriza este espacio y también se aporta a una nueva imagen que refleja la dualidad de la vida y la muerte.
Agregó que llevar el arte a las paredes de los cementerios es una tendencia en Suramérica, que se utiliza para dar mayor importancia a estos lugares que están ligados con la tristeza.