La propietaria del hotel-tanatorio: «Vienen a descansar y no les importa que haya una familia velando a los suyos»
Encarnación Pantín, propietaria de un hotel-tanatorio en el municipio coruñés de Valdoviño, ha sido entrevistada este martes en ‘Herrera en Cope’ debido a lo inusual de su modelo de negocio. Según ha explicado, la idea surge de la demanda de los vecinos, pues no contaban con hotel ni con tanatorio. “Teníamos la funeraria y la floristería y decidimos dar ambos servicios”, ha explicado.
En este sentido, ha dicho que el edificio se divide en dos zonas: a la izquierda hay 3 salas velatorias y a la derecha 22 habitaciones. Además, en el sótano está el almacén con los ataúdes y los coches fúnebres. Pantín ha señalado, sin embargo, que “la gente ya no se sorprende” de lo peculiar del enclave. “Vienen al hotel a descansar y no les importa que haya una familia abajo despidiéndose de sus seres” queridos, ha señalado.
Sí ha dicho que los huéspedes a veces se equivocan y entran con su maleta en las salas de velatorio, si bien es “la propia familia la que les indica que se han equivocado y no pasa nada”, ha confesado la hostelera. “En ese momento supone una risa pero nada más”, ha manifestado.
Preguntada por cuál de los dos negocios genera más dinero, Pantín ha dicho que no hizo un estudio de mercado previo al inicio de actividad y ha explicado que no puede entenderse el hotel sin el tanatorio y viceversa porque el primero genera beneficios “en verano” mientras que “es muy difícil predecir” los del segundo ya que Valdomiño es un municipio pequeño con una población muy dispersa, ha explicado.