Ofrecen protección especial a un grupo de capillas, panteones y sepulturas del cementerio de Polloe
El Pleno del Ayuntamiento de San Sebastián (Guipúzcoa) aprueba el Plan Especial de Polloe, que contempla la protección de lo que equivale al 6% del total de elementos construidos en el cementerio, 469 entre sepulturas, panteones y capillas dentro del Plan Especial de Patrimonio municipal.
Los elementos protegidos se dividen en tres categorías: los considerados de mayor valor 54; los de protección media 248, y los de protección básica, 167. El documento del cementerio de Polloe también contempla la apertura de un nuevo acceso a aventar las cenizas de los fallecidos, un espacio, de 2.240 metros cuadrados, ocupado anteriormente por nichos.
Los de protección especial, principalmente capillas y panteones, solo permitirán intervenciones que se consideren dentro de la denominada restauración científica y conservadora. Cada arreglo deberá respetar el estilo arquitectónico y utilizar materiales iguales o similares a los existentes. Las piezas escultóricas, la herrería, las argollas así como las cadenas y puertas de los recintos se tendrán que mantener en lo posible. Además, las inscripciones por nuevos fallecimientos deberán tener en cuenta la grafía de las sepulturas para no desvirtuar los conjuntos.
Las medidas de las losas también se respetarán y se evitará tapar el nombre de los maestros marmolistas y de los autores de los conjuntos artísticos. Este grupo de elementos protegidos deberá tener especial cuidado con sus vidrieras para garantizar su conservación. Si se han perdido las originales, o parte de ellas, se permitirá su sustitución por una nueva emplomada sencilla para cerrar los huecos.
Por su parte, los elementos afectados por protección básica podrán sufrir procesos de restauración científica y conservadora, además de trabajos de conservación y ornato, consolidación y reforma, según los decretos sobre actuaciones protegidas de rehabilitación del patrimonio urbanizado y edificado.
Las obras tendrán que salvaguardar “la unidad compositiva” y los elementos de “particular valor estilístico”. Al igual que en las construcciones de mayor valor se respetarán las piezas escultóricas y los elementos de herrería.
En ambas clases se autorizan las nuevas inscripciones respetando el tipo de letra para que no desentone el conjunto. En estas construcciones mortuorias se recomienda la realización de obras de mantenimiento para preservar su conservación, seguridad y ornato. No se autorizan otras modalidades de intervención ni de derribo. La protección media será algo más exigente, aunque sin llegar a la especial.
El Plan Especial de Polloe permite también la ampliación del crematorio, en 500 metros cuadrados, con el fin de instalar un horno mejor. La instalación, que funciona desde hace veinte años, lleva a cabo una media de 600 incineraciones al año.