Los japoneses buscan funerales más económicos
Al igual que la población envejece, la mortalidad en Japón también va en aumento. En 2017 hubo 1.340.000 muertes, un aumento del 40 % respecto a las 960.000 del año 2000. Que mueran más personas significa que hay más funerales, pero el declive de la natalidad y el aumento del porcentaje de personas solteras está transformando la forma en la que se celebran.
Un estudio del Ministerio de Economía, Comercio e Industria japonés revela que el precio medio de un funeral ha descendido ligeramente de los 1.449.000 yenes (11.270 euros) del año 2000 hasta 1.405.200 yenes en 2017 (10.930 euros).
Un funeral tradicional solía incluir una reunión de los amigos, conocidos y compañeros de trabajo para el velatorio la noche anterior y posteriormente el servicio funerario donde se presentaba los respetos al fallecido. No obstante, el cambio demográfico hace que hoy las personas que principalmente asisten al duelo sean también mayores, y por tanto los funerales a gran escala a menudo pueden resultar una carga.
Otros factores son la desaparición de los lazos comunitarios locales como las asociaciones de vecinos en las áreas urbanas, el debilitamiento del contacto entre compañeros de trabajo debido al colapso del sistema de empleo de por vida, y las circunstancias individuales que representan para muchas personas una dificultad para asistir a funerales tradicionales. En su lugar, ha habido un aumento en el número de funerales familiares a los que asiste solo la familia y los amigos cercanos, así como de las cremaciones con una breve ceremonia conocidas como “funerales directos” (chokusō).
Kamakura Shinsho, que gestiona un sitio web en el que se ofrece información sobre funerales y pompas fúnebres, realizó una encuesta nacional en 2017 en la que se revela que desde la anterior encuesta de 2015, la celebración de funerales tradicionales ha descendido en 6,1 puntos hasta el 52,8 %. Los funerales familiares han aumentado en 6,6 puntos, hasta el 37,9 %.
La encuesta señala que aunque está aumentando el número de funerales cortos, con un precio razonable y un grupo reducido de invitados, los funerales tradicionales siguen contando con un mayor arraigo y continúan siendo mayoritarios. En comparación con la anterior encuesta, el número de funerales directos ha caído ligeramente, lo que indica que aunque puede que haya menos asistentes en los funerales, la cultura del duelo sigue manteniéndose mediante la celebración de una ceremonia.
No obstante, en Tokio hay una mayor demanda de funerales sencillos, baratos y rápidos. La celebración de funerales tradicionales se mantiene en el 43 %, con un porcentaje prácticamente similar de funerales familiares. Los funerales directos aumentaron hasta el 9%.