Galicia modifica el decreto se sanidad mortuoria para dar cabida a los enterramientos islámicos
El artículo 21 del decreto de sanidad mortuoria de Galicia prohíbe la «conducción, traslado y enterramiento o incineración de cadáveres sin el correspondiente féretro o recipiente funerario», una disposición, modificada en muchas de las comunidades autónomas españolas, y que en breve se eliminará también del reglamento gallego para dar cabida a los enterramientos en contacto directo con la tierra requeridos por otras confesiones distintas del catolicismo y, singularmente, por el Islam.
Cumpliendo con el mandato del Parlamento gallego, que en abril de 2017 aprobó una proposición no de ley instando a la Xunta a revisar la normativa, la Consejería de Sanidad abrió en mayo un proceso de consulta previa para actualizar el decreto de 2014 y regular «especialmente» la posibilidad de inhumar los cuerpos sin féretro «para los casos que por razones de confesionalidad así se demande».
Mustafa Alhendi, presidente de la Comunidad Islámica en Galicia, ha señalando que las familias musulmanas, multiplican su dolor al encarecer la muerte de un ser querido en unos 8.000-9.000 euros ya que no al no poder enterrar al difunto bajo el rito islámico deben trasladarlo a su país de origen. «En Galicia somos una comunidad de casi 30.000 personas, muchas han nacido aquí, han hecho su vida aquí, y están teniendo que ser enterradas en otros países u en otras autonomías que ya han regulado esto. Conozco a varias familias gallegas que van a ver a sus muertos al cementerio de Griñón, en Toledo”.
De acuerdo a la religión islámica, explica, el cuerpo del fallecido debe ser lavado y preparado, envuelto en una tela blanca sin costuras. El cadáver se conduce entonces al cementerio y se deposita en la fosa abierta en contacto directo con la tierra, tendido sobre su costado derecho y con el rostro orientado a La Meca.
La proposición no de ley aprobada en 2017 en la Cámara autonómica instaba asimismo a la Xunta a trabajar con la Federación Galega de Municipios y Provincias (Fegamp) en la «creación de cementerios de carácter supramunicipal que puedan atender la demanda de enterramientos conforme a los criterios de las confesiones religiosas minoritarias». Abiertos a distintas vías —desde la construcción de cementerios supramunicipales al norte y sur de Galicia, pasando por la compra privada de suelo o la concesión de anexos a camposantos católicos—, Alhendi sólo aguarda que «de una vez se cumplan las promesas».