Avanzan las obras de restauración en el primer cementerio judío de Cuba
Decenas de tumbas están siendo restauradas en el Cementerio Judío de Guanabacoa en La Habana (Cuba), donde algunas datan, incluso de la época colonial.
El cementerio ―que alberga unas 1.600 tumbas― se encontraba en estado de total abandono, con lápidas caídas, tumbas sucias, rotas y creciente maleza creciendo en derredor.
La actual restauración es fruto de la colaboración de la comunidad judía de la capital cubana y de las autoridades locales, entre ellas la Oficina del Historiador de La Habana.
“Siento una paz y tranquilidad muy grande cuando visito el cementerio. Para mí es como estar junto a mi madre, a mi única hermana y a mi sobrino”, ha declarado a la agencia AP Adela Dworin, presidenta del Patronato Hebreo de Cuba.
David Prinstein, vicepresidente de la Comunidad Judía Cubana, ha explicado, por su parte, que el proceso de restauración es costoso, y en este sentido ha instado a que la diáspora judía cubana haga donaciones para el proyecto.
Según la Junta Hebrea de Cuba, la comunidad judía no había podido recaudar los 200 mil dólares estadounidenses necesarios para acometer la restauración.
El cementerio judío de Guanabacoa es uno de los dos que en la Isla alberga los restos de la antiguamente próspera comunidad judía de Cuba, reducida actualmente a una población que la citada agencia estima en unas 1.500 personas.
Muchas familias judías abandonaron el país después de 1959, dejando atrás a sus muertos de acuerdo con la costumbre judía que prohíbe que los cuerpos sean exhumados a menos que sean trasladados a Israel. Otros judíos residentes en Cuba se mudaron a Israel, a raíz de la crisis económica cubana.
La tierra para el cementerio de Guanabacoa fue comprada en 1906 por miembros de la primera sociedad hebrea de la Isla e inaugurado en 1910.
El cementerio alberga un monumento de tres metros que rinde homenaje a los seis millones de judíos que murieron en el Holocausto, y se encuentran enterradas en él media docena de jabones de los que los nazis hicieron con grasa humana.
Cuba e Israel no mantienen relaciones diplomáticas. El Gobierno de la Isla rechaza la alianza de Israel con Estados Unidos, y suelen ser los dos únicos países que aceptan el embargo en las votaciones de Naciones Unidas.