Los usuarios del Cementerio Jardín de Alcalá de Henares molestos por la poda discriminada de rosales
Los usuarios del Cementerio Jardín de Alcalá de Henares (Madrid) han mostrado su quejas por la «poda discriminada» de rosales en varias tumbas del recinto funerario.
Hace una semana fuimos a visitar la tumba de nuestros familiares y al limpiar la lápida nos encontramos con la desagradable sorpresa de que alguien había cortado (de mala manera) el rosal plantado a los pies de la tumba así como la planta de lavanda de la cabecera.
Nos dimos cuenta de que en las tumbas de alrededor habían hecho lo mismo, destrozando la mayoría de ellos por la «poda» mal hecha, por lo que entendemos que ha sido una decisión de su dirección.
En ningún momento nadie nos transmitió de ningún modo, a cualquiera de los familiares ni nos ha llegado ninguna notificación de que había que quitar el rosal o la otra planta y que tantos años después, un rosal sano se haya cortado por las buenas (además observamos que han debido echar algún producto químico para que se seque, porque el césped justo de ese rodal está quemado y el de más afuera está perfecto), sin avisar, sin consultar y de mala manera, resulta muy desagradable para los hijos y nietos de las personas allí enterradas que han cuidado con esmero tantos años (repito, desde 1996) esas plantas, que han sido respetuosos con el entorno del Cementerio-Jardín… encontrarse el panorama que vimos el domingo pasado, con algo con mucho valor sentimental, estropeado, ha sido de verdad, una lamentable situación.
Nos gustaría saber qué ha pasado, por qué se ha tomado esa decisión y por qué se ha hecho de esta manera tan radical y tan destructiva, sin pensar en el daño sentimental que se ha podido producir en las personas que intentamos mantener vivo el recuerdo de nuestros familiares cuidando la tumba (y no solo el 1 de noviembre, sino durante todo el año).