El Ayuntamiento de Molins de Rey no permite que Mémora instale un crematorio en el tanatorio que gestiona

El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Molins de Rey (provincia de Barcelona) ha aprobado el pasado martes, un Plan Especial que fija una distancia mínima de 250 metros para ubicar un crematorio.

Esta decisión afecta directamente a la funeraria Mémora, que tenia un proyecto para instalar un horno crematorio en el tanatorio que gestiona la funeraria en la localidad.

El Ayuntamiento también ha limitado las incineraciones a 200 anuales. Una cifra que se aleja de la planteada por la funeraria, que el tanatorio pretendía construir dos hornos con capacidad para quemar 1.400 cadáveres al año. Además prolonga la suspensión de licencias un año más para seguir trabajando una regulación.

Un año después de que el consistorio suspendiera la concesión de licencias para la construcción del crematorio que Mémora quería hacer el tanatorio, el gobierno municipal -ahora encabezado por los socialistas- vuelve a mover ficha.

La medida también permite prolongar un año más la suspensión de licencias que hace un año aprobó el gobierno municipal para este tipo de actividades, y que justamente finalizaba miércoles. La voluntad es aprovechar la prórroga para trabajar una regulación en firme del sector.

El alcalde, Xavi Paz, ha manifestado que «no podemos prohibir unilateralmente que Mémora instale un crematorio en el municipio después de haber ganado una concesión, pero sí podemos regularlo». El alcalde socialista se ha reunido con la empresa funeraria para hacerles saber la voluntad del gobierno municipal, que quiere asegurarse que en el supuesto de que el crematorio se instale definitivamente en el municipio, lo haga «lo más lejos posible «.