El descenso en el número de incineraciones hace replantear la construcción de un nuevo crematorio
Las incineraciones en el crematorio de Huesca han descendido en el último año, debido a la puesta en servicio de sendos crematorios en Sabiñánigo y Barbastro.
El crematorio de Huesca ha registrado en lo que va de año 345 usos, mientras que en las mismas fechas del año anterior registró 547 incineraciones.
Este descenso lleva al equipo de gobierno a replantearse el gran proyecto que tiempo atrás presentó el PSOE para ampliar el cementerio oscense y que, entre otras actuaciones, contemplaba la construcción de un segundo crematorio.
El concejal delegado del cementerio, Roberto Cacho, manifestó que «los usos del crematorio han bajado respecto al año anterior, pero hay que tener en cuenta el contexto y es que en Sabiñánigo y en Barbastro existe este servicio, por lo tanto no es el único servicio de la provincia». «Esto nos hace pensar si un segundo crematorio es necesario o no, es decir, si hay que dar prioridad inversora a un segundo crematorio o si hay actuaciones más importantes», subrayó.
Por otra parte, en el último año se han construido 216 nichos y la previsión es construir para el año que viene otros 216 nichos. La media de usos de nichos en el cementerio oscense es de 100 al año.