Los capellanes del cementerio de Málaga continúan los responsos por los fallecidos de Covid-19
Los capellanes del cementerio de San Gabriel de Málaga continúan los responsos por las personas fallecidas siempre y cuando la familia lo solicite a la funeraria, que es quien debe ponerse en contacto con ellos.
El coordinador de los capellanes del cementerio de San Gabriel, el diácono Miguel Ángel Sánchez Doblas, ha explicado que ante las normas excepcionales fijadas por el Ministerio de Sanidad en relación con los velatorios y ceremonias fúnebres, estos se han suspendido «pero el sacerdote o diácono sí puede estar presente unos minutos antes de la cremación o el enterramiento para hacer un responso junto con los tres familiares como máximo».
Sánchez Doblas ha indicado que llevan haciendo estos responsos desde principio de mes y ha asegurado que para las familias «es una tranquilidad muy grande y se muestran muy agradecidas».
Según ha trasladado el coordinador de capellanes del cementerio de San Gabriel a la web de la Diócesis de Málaga, recogida por Europa Press, unos minutos antes de la cremación el capellán celebra un pequeño responso, con una oración del ritual de exequias a modo despedida en la antesala del crematorio.
«Durante la misma, los familiares y el sacerdote –ha explicado– están separados del féretro por un cristal, por lo que aunque el fallecimiento se hubiera debido al COVID-19 no habría riesgo de contagio».
Incluso si la familia fuera a enterrar a un difunto, ha proseguido Sánchez Doblas, «el capellán lo despide junto a la fuente que hay delante la capilla, camino del Campo Santo, o bien a pie de nicho se le hace el responso».
Sí ha querido aclarar que deben ser las propias familias las que lo tienen que solicitar a la funeraria y esta se pone en contacto con los capellanes, siendo ocho los que están disponibles.
Por otra parte, cuando pase el estado de alarma, ha recordado que se podrán celebrar misas por el alma de los difuntos, si así lo desean los familiares, concertándolo con el párroco. También ha subrayado que todos los días los párrocos rezan por los fieles difuntos en la celebración de la misa.