Los restos humanos hallados durante las obras del solado de la iglesia de San Salvador trasladados al osario
Las obras de renovación que se están ejecutando en la iglesia de San Salvador del municipio de Morales de Toro (provincia de Zamora) han permitido recuperar gran cantidad de restos óseos que, tras recabar la autorización del Servicio Territorial de Patrimonio y del Ayuntamiento, han sido trasladados al osario del cementerio.
La Opinión de Zamora cuenta que el párroco de la Unidad de Acción Pastoral-Morales, Jesús Campos, explicó que los restos fueron hallados tras levantar la tarima del suelo del templo, sobre el que está previsto adecuar un nuevo solado con piedra de campaspero y pizarra.
Precisó el párroco que los restos óseos que las obras han dejado al descubierto son anteriores a la prohibición, por motivos sanitarios y de salubridad, de enterramientos en el interior de las iglesias, prohibición refrendada en 1787 en una Real Cédula dictada por Carlos III, que además disponía la construcción de cementerios fuera de las poblaciones.
Por este motivo, como precisó Campos, «es muy común» que en todas las iglesias se conserven sepulturas y que, en el caso de la de San Salvador en Morales de Toro, han sido descubiertas al retirar la tarima del suelo y al realizar una excavación para adecuar las conducciones de un nuevo sistema de calefacción.
«Por razones técnicas», según explicó, ha sido necesario retirar los restos óseos de «antepasados del pueblo de Morales de Toro» en las zonas por los que discurrirán los conductos de la calefacción, aunque otros muchos se mantendrán en el lugar de la iglesia en el que recibieron sepultura.