El Tesla Model S se ha convertido en un coche fúnebre y ecológico
Los automóviles fúnebres suelen ser de gasolina o gasóleo, por lo que existe cierto ruido en el habitáculo que impide el silencio absoluto. Sin embargo, existe una solución completamente ecológica que sí promete rendir el tributo perfecto a la persona fallecida y su nombre es Binz.E.
EL TESLA MODEL S
Se trata de un Tesla Model S que nace bajo la colaboración entre Coleman Milne, con sede en Bolton, y la firma alemana BINZ International. El Binz.E comenzó su vida como un vehículo de pasajeros estándar, pero ha sido objeto de una conversión significativa para acomodar un ataúd. Como resultado, la parte trasera del automóvil se ha extendido y la línea del techo se ha vuelto más alta, mientras que la distancia entre ejes también ha aumentado para equilibrar la carrocería del automóvil. Ahora, el modelo californiano mide 5,82 metros de largo y su altura es de 1,72 m.
Los responsables de este coche fúnebre ecológico aseguran que cualquier Model S podría adaptarse a este uso, por lo que siguen conservando los mismos ingredientes que cualquier unidad salida de las factorías de Tesla. Eso incluye un habitáculo minimalista liderado por una gran pantalla vertical, sus diferentes y singulares aplicaciones, así como un tren motriz que permite alcanzar los 100 km/h en menos de tres segundos. En cuanto a la autonomía, el Binz.E promete un rango de uso de unos 350 kilómetros con una sola carga.
Los precios de la conversión no han trascendido, aunque si tenemos tomamos como referencia los 198.000 euros que pide Jan Erik Naley por su particular Model S, es decir, otro Tesla fúnebre que vimos el pasado año, no es de extrañar que muchos descarten al modelo californiano.
