El Instituto de Medicina Legal de Madrid se convierte en referente de la investigación y la lucha contra el Covid
El Instituto de Medicina Legal de la Comunidad de Madrid se convierte en un referente de la investigación y la lucha contra la covid-19, con diez laboratorios, una sala de bioseguridad, 49 mesas de autopsia y capacidad para albergar 225 cadáveres, y de la que se hizo uso durante el pico de la pandemia como morgue provisional.
El consejero de Justicia, Interior y Víctimas, Enrique López, visitó ayer jueves, los trabajos en el edificio, de ocho plantas, que albergará también un centro de formación e investigación.
López ha subrayado que el Gobierno regional quiere convertir este edificio «en la punta de lanza de lo que va a ser la futura concentración de todos los inmuebles del partido judicial de Madrid, construidos en esta zona junto a este edificio», donde se ubicaba el Instituto Anatómico Forense desde hace 40 años.
«Serán los profesionales de la forensía, los que a través de la investigación y el estudio nos ayuden a combatir el COVID-19, dando cobertura al Hospital de Emergencias, que se ubicará en una parcela anexa», ha remarcado el consejero.
Con una inversión de 4,3 millones de euros, las obras tendrán una duración de tres meses para la construcción de un edificio de planta circular, de 13.500 metros cuadrados, que contará con diez laboratorios, una sala de bioseguridad para la realización de autopsias a cadáveres contagiados por covid-19 y virus similares, y 49 mesas de autopsia.
López ha precisado que la capacidad para realizar autopsias puede llegar a duplicarse «en circunstancias extraordinarias», como accidentes en los que se produzcan un gran número de fallecidos o atentados.
La instalación dispone de cámaras de conservación para albergar hasta 225 cuerpos, 123 en cámaras individuales y el resto en dos cámaras frigoríficas colectivas.
Además, contará con una sala de bioseguridad que deberá garantizar la seguridad de médicos forenses, técnicos auxiliares de autopsia, técnicos de laboratorio y fotógrafos que intervienen en autopsias a cuerpos cuya causa de fallecimiento esté vinculada a virus o pandemias.
La puesta en marcha del Instituto de Medicina Legal será en otoño, y deberá coordinar el trabajo de cerca de 400 empleados públicos, entre forenses, psicólogos y trabajadores sociales.
También contará con aulas de formación; salas de rayos X; un salón de actos; 61 despachos de trabajo y salas de descanso y polivalente de los forenses.
El edificio dispondrá, además, de todos los servicios necesarios para su adecuado funcionamiento, incluyendo servicios generales, patología, antropología y odontología forense, toxicología y bioquímica forense, hemogenética forense, aulas magnas de formación e histopatología, entre otros.