El Instituto de Medicina Legal de Granada dispone de una Sala de Grandes Catástrofes para recogida de cadáveres
La Junta de Andalucía ha puesto en marcha en las instalaciones del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses (IMLCF) de Granada una Sala de Grandes Catástrofes que permite ampliar el espacio para recoger cadáveres en caso de un suceso de grandes dimensiones con 26 plazas, que vienen a sumarse a las 12 ya existentes.
Las nuevas instalaciones, operativas desde hace algo más de un año, han sido visitadas este miércoles por el viceconsejero de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local, Manuel Alejandro Cardenete, quien ha podido conocer todos los detalles de funcionamiento de este tipo de salas, que consiste en un espacio amplio dotado de varias estanterías y bateas en las que se mantienen los cuerpos en refrigeración hasta que se les practique la autopsia y hasta que sean derivados posteriormente a la funeraria.
«Son dotaciones muy necesarias para cubrir una posible necesidad que pueda surgir en Granada o provincias limítrofes, especialmente dadas las circunstancias de esta provincia, con una costa que es un punto de llegada de pateras, o bien porque se produzca algún tipo de accidente de tráfico o ferroviario a gran escala, o cualquier catástrofe natural», ha destacado el viceconsejero.
La sala cuenta así con 26 plazas de refrigeración, dispuestas en cinco estanterías de cuatro bateas cada una y otras dos estanterías de tres bateas. A estas plazas se suman otras 12 en refrigeración en otra sala situada junto a la de autopsias, que son las que se usan habitualmente para el trabajo diario del IMLCF para la realización de las exploraciones.
Igualmente, las instalaciones disponen de otras nueve plazas en congelación para cadáveres no identificados a la espera de que se culmine el proceso de identificación, con lo que, en total, el IMLCF dispone de 38 plazas en refrigeración y nueve en congelación. Esta está normalmente vacía, salvo en caso de entrada masiva de cuerpos.
La temperatura de la misma se mantiene siempre constante, a unos dos grados (siempre por debajo de cinco), para que esté lista en caso de que tuviera que utilizarse de forma urgente, según ha explicado la directora del IMLCF, Nieves Montero de Espinosa, a los asistentes a la visita.
MÁS DE 60.000 EUROS DE INVERSIÓN
La inversión realizada en este espacio para su creación y puesta en uso ha sido de 62.535 euros, de los que 16.344 corresponden a la obra de adecuación; para los equipos de refrigeración se han destinado 13.659 euros; 8.143 euros para la estructura de acero para la camillas, que han tenido un coste de 14.392 euros; mientras que el carro elevador ha supuesto otros 9.994.
