Aparecen restos arqueológicos del antiguo cementerio medieval del monasterio de San Cugat del Vallés
Las últimas obras de construcción de viviendas en la céntrica plaza Octavià de San Cugat del Vallés (provincia de Barcelona) han hecho aflorar nuevos restos del antiguo cementerio medieval del monasterio. Las actuaciones en la finca donde estaba Cal Boter Negre han permitido documentar cinco sepulturas, una de las cuales estaba cubierta por tres losas.
El Ayuntamiento destaca que el encuentro reafirma la dimensión de la necrosis, de la cual habían aparecido algunos restos puntuales. La principal hipótesis es que los esqueletos pertenecen a fieles atraídos por la influencia religiosa del monasterio, los cuales dejaban su herencia a la comunidad religiosa. Por otro lado, las excavaciones también han sacado a la luz restos romanos del siglo I y otras más modernas, del siglo XIX.
Los hallazgos serán depositados en el fondo de Museos de San Cugat
Los vestigios más remotos son un pequeño horno y un pavimento impermeable tipo ‘opus signium’ (un material usado en las construcciones de la antigua Roma). Los investigadores, la empresa Àger SL, destacan que, según los restos, en la finca habría habido un espacio de trabajo relacionado con el establecimiento que ocupó el espacio siglos antes de la construcción del monasterio.
En lo referente a los hallazgos del siglo XIX, se trata de elementos de fundamentación y alcantarillado de Cal Boter Negre, así como un lagar de vino alicatado y con vuelta fechado de 1883, en sintonía con la economía vitivinícola de ese momento.
Los materiales desenterrados, ahora en proceso de estudio y clasificación, serán depositados en el fondo de Museos de Sant Cugat para velar por la conservación, el acceso a los investigadores y la difusión.
