Los once cipreses calcinados por un rayo en el cementerio de Cacabelos transformados en dos esculturas

Un rayo calcinó once cipreses del Cementerio de Cacabelos (provincia de León) el 9 de mayo de 2017. Fue una pérdida lamentada por tratarse de árboles monumentales del Bierzo. Hoy el camposanto ya muestra dos esculturas encargadas por el Ayuntamiento al artista Eugenio Dinares.

Las dos esculturas han sido creadas in memoriam de los propios árboles calcinados con el nombre de «las alas del alma» en recuerdo a todas las almas de camposanto, ante la imposibilidad de replantar el conjunto en el mismo lugar en el que cayó el rayo.

El alcalde, Junior Rodríguez, asegura que las esculturas han permitido conservar en cierta forma «esos árboles que tanto sentimiento y tanta devoción tienen los cacabelenses por ellos». Revela además que su equipo tiene intención de replicar esta iniciativa de crear arte a partir de restos forestales en otros puntos del municipio.

Explicaron que ambas esculturas representan «las alas del alma», como su título indica. «En primer término lo que pretendíamos era, en el año en el que se cortaron, replantar (los árboles). La idea artística surgió por tanto del deseo de conserva los restos de los árboles, pero sin poner en peligro las tumbas ni destinar una parte importante del presupuesto del ayuntamiento. Díaz finaliza su intervención «deseando que la obra sea del gusto de todos, porque era lo que se pretendía; no herir la sensibilidad de nadie, de ninguna religión tampoco».

El escultor Linares cuenta que la idea del diseño nace de la búsqueda de «representar la espiritualidad y las almas de las personas con algo con lo que se pudiera identificar todo el mundo». Las figuras están realizadas con motosierras, y el trabajo físico tardó un par de semanas en completarse.