El cementerio de Les Pruelles galardonado como la mejor iniciativa medioambiental de toda España

El Cementerio de Las Pruelles de Sitges (Garraf, Barcelona), y gestionado por Áltima, la compañía líder del sector funerario en Cataluña, ha sido galardonado en la categoría de Mejor Iniciativa Medioambiental 2023 en la 8ª edición del Concurso de Cementerios de España. Los prestigiosos galardones son otorgados cada año por la revista Adiós Cultura.

El jurado de los galardones ha querido destacar del cementerio de Les Pruelles todas aquellas tareas de mejora, innovación y de respeto a la naturaleza que se han llevado a cabo y que lo convierten en un espacio único y singular entre el resto de cementerios de todo el estado.

Placas fotovoltaicas. A lo largo de 2023 en el cementerio de Les Pruelles se han instalado 94 módulos de placas fotovoltaicas consiguiendo un ahorro energético de más del 90% de su consumo o, lo que es lo mismo, el equivalente a evitar casi 30 toneladas de CO2 y generando más de 66 Mwh de energía verde.

Jardín del anhelo. El cementerio estrenó en 2023 un espacio para las personas que han perdido a un hijo o hija durante la gestación, el parto o pocos días después de haber nacido. Esta nueva zona destinada al duelo perinatal, y respetuoso con el medio ambiente, permite dar un espacio adecuado para que las personas que han pasado por esta experiencia puedan completar su duelo particular. El espacio, situado cerca de la entrada principal del cementerio y rodeado de vegetación, contiene un camino sinuoso en torno al cual las familias que lo deseen pueden colocar pequeñas estrellas de colores elaboradas artesanalmente a base de áridos y cenizas.

Los almendros. Este espacio ofrece una nueva alternativa totalmente sostenible para aquellas personas que opten por la incineración. El espacio acoge a 25 almendros, un árbol típicamente mediterráneo, cuyas flores simbolizan amor eterno, esperanza y alegría. Alrededor de cada árbol es posible enterrar hasta cinco urnas biodegradables con las cenizas de los seres queridos y colocar en ella una placa que identifica el nombre de los familiares difuntos.

El jardín de las amapolas. Este jardín es un terreno habilitado que permite enterrar una urna biodegradable, sobre la que se coloca una amapola de porcelana. Así, se conforma un campo de amapolas a modo de memorial, que cuenta con un espacio donde se graban los datos del difunto.

Urna pluvial. El propio cementerio, en su vocación de servicio integral, de sostenibilidad y de respeto al medio ambiente, permite optar por una sepultura a través de una urna pluvial, fabricada en bronce y que permite hasta dos inhumaciones de cenizas a la vez. Las cenizas que contiene la urna se irán depositando en el suelo gracias a la acción del agua. Más allá del simbolismo y la emotividad de la iniciativa, esta opción tiene la ventaja de que también es posible grabar los datos del difunto en una placa memorial cercana.

Vehículos eléctricos. Esta iniciativa es otra acción que Áltima ha puesto en marcha el último año para contribuir al uso de energía limpia y la reducción del impacto ambiental. En la zona donde se ubica el cementerio el 50% de la flota de vehículos es ya eléctrica y se prevé continuar actualizándola. El objetivo corporativo es llegar a las 70 unidades cuando se complete el programa, que también prevé 70 puntos de recarga en los aparcamientos de los centros que la empresa tiene por toda Cataluña.

Planta Viva. Áltima ha sido pionera en el desarrollo de propuestas para que el último adiós sea lo más respetuoso posible con el entorno. De esta forma, se dispone del servicio Planta viva, que permite confeccionar las tradicionales ofrendas florales al difunto (corona o centros), a partir de macetas con plantas vivas procedentes de viveros de Cataluña. De esta forma, se potencia el uso de la flor viva y de proximidad, disminuyendo su uso de flora cortada importada, contribuyendo a la reducción de la huella de carbono y a la disminución de las mermas de flor natural.

Áltima siempre al frente del I+D y las mejoras medioambientales

Desde la primera edición de los galardones, en 2014, este Concurso de Cementerios de España se ha convertido en uno de los eventos culturales más importantes del sector funerario y en todo un referente para los ayuntamientos del estado, que llevan años priorizando el cuidado de sus cementerios y promoviéndolos como espacios integrados que merecen ser visitados. La iniciativa del Concurso busca reconocer el interés histórico, social, artístico, medioambiental y patrimonial de los cementerios españoles.

Este galardón no es nuevo por Áltima ya que el cementerio Comarcal Roques Blanques en El Papiol (Barcelona), gestionado también por la compañía catalana, fue galardonado en esta misma categoría de Mejor Iniciativa Medioambiental en los años 2015 y 2018.

Como afirma el consejero delegado de Áltima, Joan Ventura: “reconocimientos como éste ponen en valor una de las prioridades de Áltima, dar un servicio de excelencia a las familias y, a su vez, hacerlo desde la búsqueda de la mejora del territorio e innovando de forma sostenible y respetando el entorno natural, que es el mayor legado que vamos a dejar a las próximas generaciones”.