La construcción del tanatorio municipal de Benidorm entra en la fase de hormigonado de la parcela
El proyecto del nuevo tanatorio municipal de Benidorm, provincia de Alicante, se encuentra en una fase crucial con el inicio de los trabajos de hormigonado, tras haber completado las labores de desmonte y adecuación del terreno, así como la colocación de la ferralla y encofrados.
Esta infraestructura, muy demandada por los residentes, evitará desplazamientos a otras localidades para los servicios funerarios. El tanatorio, ubicado en una parcela pública del Plan Especial de Ampliación del Cementerio Municipal Sant Jaume, forma parte de un proyecto más amplio que incrementa significativamente la superficie del cementerio, de 41.780 a más de 91.000 metros cuadrados, asegurando la capacidad de enterramiento para las próximas décadas y dotándolo de todas las infraestructuras modernas necesarias.
El edificio del tanatorio se caracteriza por su diseño con porches abiertos que aprovechan el clima de Benidorm para asegurar una buena iluminación natural. Contará con seis salas de velatorio, todas con la misma superficie y equipadas con túmulos refrigerados, comunicadas por un pasillo central para optimizar el espacio. Además, habrá una cafetería con cocina, almacén, terraza exterior cubierta y máquinas expendedoras, un comedor para empleados, aseos generales y adaptados, una sala de tanatopraxia, horno crematorio, garaje para coches fúnebres, almacén de féretros y un grupo antiincendios con depósitos de agua.
El acceso peatonal principal se situará frente al aparcamiento público, parte del plan especial, con capacidad para más de 600 vehículos. Este proyecto, según el alcalde Toni Pérez, no solo responde a una necesidad urgente sino que también asegura que el cementerio y sus instalaciones puedan servir a la comunidad durante muchos años.