Preocupación ante el posible cierre del Tanatorio Servisa Huelva
El Tanatorio de Servisa Huelva lleva un tiempo atravesando una crisis económica importante, los servicios cada vez son menos, el tanatorio prácticamente está todos los días desierto y recientemente han colocado unas vallas de casi 2 metros en todo el perímetro del tanatorio y barreras dirigidas desde una caseta donde están instalados guardias de seguridad que permiten la entrada a los usuarios.
Desde la Confederación General del Trabajo (CGT) han mostrado su preocupación e inquietud a la dirección de la empresa sin que está haya dado alguna respuesta. “Nos preocupa que se esté preparando un cierre del Tanatorio Servisa de Huelva”.
Con pérdidas económicas y con trabajadores y trabajadoras ganando algo más más del salario mínimo interprofesional, no se explica este desembolso en infraestructuras totalmente innecesarias además de la contratación de 10 guardias de seguridad.
Hay que recordar que el Tanatorio Servisa de Riotinto fue vendido hace poco más de 2 años a grupo Finisterre, en un acto de reapertura que se celebró el 25 de noviembre de 2021. Los empleados se enteraron de la venta a través de la prensa.
Más de 20 trabajadores forman la plantilla de Servisa Huelva, que se verían en la calle de una día para otro, como ya pasó con Servisa Bilbao en el año 2011, sin previo aviso, el tanatorio fue tomado por guardias de seguridad y cerrado durante casi 2 años.
A las desastrosas cifras de beneficios se les suma la multa de 903.000 euros que les interpuso el Consejo de Defensa de la Competencia, por negarse a alquilar salas velatorios a un competidor, y otra de 80.000 euros por parte de la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD).
CTG exige que de ser cierto el cierre, la empresa lo comunique de inmediato a las asociaciones sindicales y a los trabajadores y trabajadoras del tanatorio.
