El Ayuntamiento de Valencia apoya a las familias afectadas por la DANA con medidas fiscales extraordinarias
En un esfuerzo por aliviar la carga emocional y económica de los damnificados, el Ayuntamiento ha incluido en su presupuesto para 2025 una serie de medidas fiscales excepcionales. Entre ellas, la exención de tasas funerarias para aquellos que han perdido a seres queridos durante el devastador temporal.
Este alivio llega en un momento crítico, cuando las familias, además de enfrentar el dolor por la pérdida, deben hacer frente a unos gastos funerarios que, en España, pueden superar los 3.700 euros de media debido a un IVA del 21%. Con la exención de las tasas municipales, el Ayuntamiento pretende aliviar parte de esta carga económica en las pedanías más golpeadas, como La Torre, Castellar y Horno de Alcedo.
Pero la ayuda no termina ahí. En total, el presupuesto de 2025 incluye una asignación de 18 millones de euros para la reconstrucción de estas áreas, afectadas no solo por las pérdidas humanas, sino también por la destrucción material. Se destinan también bonificaciones del 95% en el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) para facilitar la rehabilitación de viviendas y la restauración de infraestructuras clave.
Además, el “escudo fiscal” diseñado por el Ayuntamiento de Valencia contempla exenciones adicionales, como la reducción del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y la ampliación de los plazos para el pago de impuestos en las pedanías afectadas. A los pequeños negocios que vieron interrumpida su actividad, se les eliminarán las tasas por ocupación del espacio público, como las correspondientes a las mesas y sillas de terrazas de bares. También se exonerará el pago de tasas para las obras de reconstrucción y el uso de terrenos públicos para almacenar materiales de construcción.
Sin embargo, el Ayuntamiento también ha aprovechado esta oportunidad para solicitar al Gobierno central la reducción del IVA en los servicios funerarios. En un contexto de crisis, donde los recursos económicos son aún más limitados, se plantea que el tipo impositivo se reduzca al 10%, tal como ocurre con otros sectores esenciales. Esta medida podría generar un ahorro significativo para las familias que ya atraviesan una situación difícil y brindarles un respiro en un momento tan doloroso.
En estos tiempos de incertidumbre, el gesto del Ayuntamiento de Valencia ofrece algo más que ayudas fiscales: un apoyo real a quienes más lo necesitan. El coste emocional y material de una catástrofe como la DANA no puede medirse únicamente en dinero, pero estas medidas proporcionan, al menos, un pequeño alivio ante el sufrimiento.
