Protesta en Zahara de los Atunes ante la gestión del cementerio y las restricciones horarias
El pasado sábado, 16 de noviembre, Zahara de los Atunes vivió una jornada de protesta en la que más de un centenar de vecinos se manifestaron frente al cementerio parroquial, cansados de las restricciones horarias impuestas por el Obispado de Cádiz y Ceuta. La medida, que ha reducido el horario de apertura de lunes a viernes de 10:00 a 14:00 horas, dejando el camposanto cerrado los fines de semana y las tardes, ha levantado un profundo malestar en la comunidad.
La protesta refleja un descontento acumulado que comenzó durante el pasado verano, cuando el Obispado decidió recortar el horario de acceso al cementerio, dificultando a muchas personas la posibilidad de visitar a sus familiares fallecidos, sobre todo en los fines de semana. Este ajuste en los horarios se ha convertido en un tema central de discusión para los residentes de Zahara de los Atunes, quienes consideran que esta medida no respeta el derecho de las familias a rendir homenaje a sus seres queridos en los momentos más adecuados para ellas.
Diálogo sin resultados
El malestar llegó a tal punto que, el pasado mes de octubre, el presidente de la Entidad Local Autónoma (ELA) de Zahara de los Atunes, Agustín Conejo, mantuvo una reunión con el Consejo Pastoral de la Parroquia del Carmen para intentar hallar una solución. Sin embargo, aunque se ofreció una ampliación temporal del horario en la festividad de Todos los Santos (de 09:00 a 17:30 horas), la medida no fue suficiente para aplacar las quejas de la comunidad, que sigue demandando una solución más permanente y accesible.
Posible cesión de la gestión a la ELA
Ante el descontento generalizado, el Obispado ha propuesto ceder la gestión del cementerio a la ELA de Zahara de los Atunes, un modelo que también se negocia para el cementerio de Barbate. Sin embargo, Agustín Conejo ha dejado claro que las condiciones ofrecidas no son aceptables para la Entidad Local, que exige una cesión total y sin contraprestaciones. Esta propuesta, que podría resolver la gestión y horarios del cementerio, sigue siendo un punto de fricción entre las partes.
Por el momento, los vecinos de Zahara de los Atunes continúan movilizándose, pidiendo que el acceso al cementerio sea más flexible y adaptado a sus necesidades. Mientras tanto, el Obispado y la ELA siguen buscando una fórmula que permita equilibrar las demandas de los habitantes con la gestión del espacio. La situación sigue siendo incierta, pero la unidad vecinal demuestra el compromiso de la comunidad para defender lo que consideran un derecho fundamental: la posibilidad de honrar a sus seres queridos sin limitaciones.
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