Ciutadella recupera 209 sepulturas del cementerio tras dos décadas de irregularidades
Después de más de dos décadas de irregularidades y fraudes en la gestión del cementerio de Ciutadella, el Ayuntamiento ha iniciado un proceso definitivo para recuperar 209 nichos que habían sido transmitidos de manera irregular. La medida afecta a 32 titulares que deberán renunciar a los derechos sobre estas sepulturas y devolverlas al municipio, como parte de un acuerdo para restablecer el orden en un servicio que ha sido manchado por años de problemas administrativos y legales.
El conflicto se remonta a la década de los 2000, cuando la antigua concesionaria del cementerio, Edifincas Menorca, gestionaba los servicios funerarios. Durante este periodo, la empresa, aprovechando su posición, realizó ventas simuladas y fraudulentas de unidades de enterramiento a personas de su entorno, sin respetar las condiciones del contrato ni devolver los nichos al municipio tras el fin de la concesión en 2005.
Tras años de incertidumbre, la segunda teniente de alcalde, Maria Jesús Bagur, ha confirmado que el Ayuntamiento ha logrado avanzar significativamente. «Estamos contentos de recuperar estas sepulturas y de poder ponerlas a disposición de los vecinos de Ciutadella», asegura Bagur. La recuperación de estos espacios, asegura, ha sido posible gracias al “exhaustivo” trabajo de los servicios jurídicos y a las negociaciones con los antiguos gestores.
El Ayuntamiento no solo ha requerido la devolución de los nichos, sino que también ha reclamado a la empresa concesionaria el pago de 73.388 euros más intereses por las transmisiones realizadas de forma indebida desde 2013. Además, se ha exigido liberar gran parte del aval bancario de 60.000 euros depositado al inicio de la concesión, una medida que supone un paso más hacia la transparencia y el control público del servicio funerario.
Este proceso, que comenzó hace dos años y medio, en 2022, ha sacado a la luz las graves irregularidades cometidas durante años. Informes municipales detectaron evidencias de fraude, incumplimientos del contrato e incluso infracciones penales. Aunque inicialmente se consideró llevar el caso ante la Fiscalía, finalmente se optó por un acuerdo extrajudicial para agilizar la recuperación de los bienes y evitar más años de litigios judiciales.
La gestión del cementerio en Ciutadella arrastra polémicas desde hace más de 20 años. En 2013, el Ayuntamiento rescindió la concesión a la UTE Edifincas-Funeraria Bonet tras un dictamen del Consell Consultiu que acreditaba incumplimientos graves. Durante esa etapa, se documentaron prácticas irregulares como la realización de exhumaciones sin permisos, facturas falsas y traslados de restos entre cementerios. La Conselleria de Salud sancionó estos actos con multas que sumaban 231.000 euros.
Hoy, el gobierno local celebra haber recuperado finalmente el control de las sepulturas y espera cerrar un capítulo de años de caos en la gestión funeraria. El proceso también deja una lección clara: los cementerios, como espacios públicos, deben gestionarse con transparencia y respeto hacia los ciudadanos.
A partir de ahora, las 209 sepulturas recuperadas volverán a estar disponibles para los vecinos de Ciutadella, devolviendo así la dignidad a un servicio fundamental que durante años estuvo marcado por la opacidad y el desorden.
